La opinión de la mayoría que, en consulta pública, eligió a un ahuehuete como el nuevo inquilino de la Glorieta de la Palma, no es la misma que la de Salvador Arias Montes, jefe del Jardín Botánico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Este científico dice que el árbol de la manita hubiera sido más adecuado para sustituir a la palma gravemente afectada por un hongo, la cual después de más de 100 años de haber estado en el lugar, fue retirada en abril pasado.
Los estambres de la flor, parecidos a los cinco dedos de la mano, son el motivo de que se diera a este árbol originario de México el nombre que lleva.
“Por mucho tiempo se creyó que sólo existía de esta especie un ejemplar que estaba en Toluca, pero posteriormente se han encontrado otros muchos en Guatemala y en otras regiones”, se lee en el tomo 1 de la Enciclopedia Agrícola de Conocimientos Afines (1945), de Rómulo Escobar, fundador de la Escuela Particular de Agricultura de Ciudad Juárez, Chihuahua.
El árbol de la manita obtuvo 9,209 votos en la consulta en que participaron más de 200 mil ciudadanos, y quedó en el quinto lugar detrás del ahuehuete, con 77,487 votos; la palma canaria, con 71,293; la jacaranda, con 24,237; y la Ceiba, con 11,083. Mientras que las posiciones sexta, séptima y octava corresponden respectivamente al fresno, con 5,718 votos; otras opciones, con 2,644; y, finalmente, el sicomoro mexicano, con 1,973.