Los 7 ingredientes del éxito de Mayra González en Nissan

Aprovecha las oportunidades. González ha ocupado varias posiciones en la industria: fue vendedora en una agencia automotriz, trabajó en la construcción de la financiera CrediNissan, luego pasó al área de ventas, fue nombrada gerente de ventas de la compañía y, finalmente, le ofrecieron ser la primera directora de desarrollo de la red de distribuidores. Ella aceptó la oportunidad, que representó un gran salto en su carrera profesional.

“No existía red de distribuidores en México, yo no sabía ni de qué se trataba. Siempre digo que cuando se abre el elevador hay que subirse, porque te puede llevar a lugares inesperados. Encontré un proyecto que fue el más duro, emocional y profesionalmente, pero a la vez muy gratificante", explicó la directora en entrevista para Expansión en julio de 2016.

La ejecutiva logró que esa red nacional fuera la número uno en cuanto a rentabilidad. Para ese reforzamiento, los distribuidores invirtieron casi 150 millones de dólares entre 2009 y 2012.

Confía en ti mismo. Mayra González confiaba en que algún día ocuparía la dirección general y la presidencia de Nissan Mexicana, la posición que tenía hasta antes de ser nombrada directora general de ventas globales de Nissan Motor.

“Llega un sueño que yo sabía que iba a cumplir, aunque no sabía cuándo”, apuntó. “Es mi pasión. Siempre he dicho que tengo gasolina en la venas, pero ahora voy a decir que tengo electricidad para que pueda circular todos los días”.

Esa confianza en sí misma es una de las características que reconoció José Muñoz, quien hasta enero de este año era presidente y chairman de Nissan Norteamérica: “Tiene mucha energía y confianza en sí misma y, lo más importante: es capaz de implementar la estrategia y entregar resultados”, afirmó.

Arma un equipo fuerte. Contar con un grupo de colaboradores sólido es indispensable para González. “Es el poder de tener talento. Y puedes tenerlo, pero si no lo desarrollas y no desarrollas a tu equipo… Al final, este juego se llama equipo y nosotros tenemos uno sólido. Este talento se identifica, se desarrolla y se aprovecha. Incluso lo hemos exportado a otros países”, detalló.

Francisco Soto, director de flotillas de Nissan Mexicana, pudo comprobar este trabajo con los colaboradores desde el primer minuto en que la conoció cuando González lo entrevistó para una posición en Nissan. “Es una persona que habla poco, pero es muy directa en sus indicaciones. No me costó nada de trabajo entender qué era lo que ella esperaba y quería. Y desde ahí noté la personalidad del humor negro que tenía. (Durante la entrevista) me hizo venderle un ataúd con un emblema de un equipo de futbol”, recordó.

Con la mirada hacia adelante. Estar preparada para afrontar cualquier revés ha sido una de las claves que la han llevado a consolidarse como líder en la compañía japonesa.

“Tomas la situación, la entiendes, la digieres y haces una acción, porque no te puedes quedar instalado en el momento. Tienes que ver qué pasó, entenderlo y seguir hacia delante. Este negocio no te permite parar”, consideró.

Apuesta por la honestidad y el balance. De acuerdo con Francisco Soto, la transparencia y el equilibrio son pilares importantes del liderazgo de González.

“Al venir de una cultura del esfuerzo, siempre ha dejado claro que, para sobresalir, hay que ser honestos”, agregó. “Y a administrar los tiempos: hay para todo, para el tema profesional y para hacer vida personal. Ella administra muy bien sus agendas”.

Compite para ganar. Para González, lo fundamental es que las mujeres quieran aspirar a puestos directivos y que las empresas creen la oportunidad.

“Esto no es un club, es una industria, y si las empresas fueran suficientemente listas se darían cuenta del potencial económico y social que supone incluir a las mujeres en los negocios. La responsabilidad número uno de esta empresa es desarrollar más líderes, independientemente de los números que la corporación espera que entregues. La mujer debe entrar ahí a competir, a competir”, recalcó la directiva. “A mí nunca me enseñaron que por ser mujer podía estar en una industria u otra, a mí me dijeron que si iba a competir, es porque iba a ganar”.

Prepárate y conoce tus habilidades. La ejecutiva no olvida el comienzo de su carrera, cuando tenía que manejar 20 horas hasta Ciudad Juárez para reunirse con los distribuidores.

“El problema no era manejar, el reto era que el dueño de la distribuidora me tomara en serio. Eso fue hace 20 años y ya buscaba la forma de cómo tenía que llegar, con información, preparación y estrategias. Si tú le dices algo que le ayude en su negocio, te va a escuchar. En México, lamentablemente, aún encontramos esa parte de timidez o de no conocimiento de las habilidades. Eso empieza desde casa, las mujeres, como madres, tenemos la obligación de hacerles saber a nuestros hijos que no hay límites. A mí me lo enseñaron en casa y me lo creí”, destacó.