Este sexenio cerrará con la inversión física pública más baja en 10 años
La actual administración federal proyecta cerrar el próximo año con el menor nivel de inversión física, como proporción de la economía, de los últimos 10 años, debido en gran parte a los continuos recortes al presupuesto ante la baja de los ingresos públicos.
Para 2018, el ejecutivo ha propuesto al Congreso que los recursos de todo el sector público destinados para la construcción de obra pública (salarios, operación, generación del proyecto, proyecto de pre inversión, entre otros), representen 2.5% del Producto Interno Bruto (PIB), la proporción más baja registrada desde 2007, cuando ésta fue de 2.8%, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el proyecto de Presupuesto de Egresos 2018.
De aprobarse por el legislativo, el porcentaje para el siguiente año será menor al esperado para 2017 que es de 2.8% e incluso proyecta que para 2019 baje a 2.4%, según los Criterios Generales de Política Económica 2018.
La propuesta del ejecutivo para el próximo año en inversión física del sector público incluye recursos para comprar bienes muebles, inmuebles e intangibles, edificios, terrenos, mobiliario, equipamiento, así como las asignaciones para obra pública y proyectos productivos por 577,860 millones de pesos (mdp), monto 1.36% mayor, en comparación con el presupuesto aprobado para 2017.
Sin embargo, en comparación con el gasto en inversión física ejercido en 2013, primer año de la actual administración, los recursos que se prevén utilizar en 2018 son 21.45% menores.
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El gasto en inversión física disminuyó en 2015 y 2016 y se espera que lo mismo pase este año, pues de enero a junio de 2017 cayó 22.6% frente al mismo periodo de 2016, la caída más pronunciada de los últimos cinco años.
Los motivos
Las bajas en la inversión física obedecen a diversas razones, recortes al gasto desde 2015, una descentralización de este tipo de gasto y la prioridad de cuidar indicadores para mantener la calificación crediticia del país, es parte de la lista, consideran especialistas.
“Este año el paquete económico está restringido por la necesidad de demostrar un control en las finanzas públicas ante el mundo”, dijo Adriana Berrocal, presidenta del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), al participar el lunes pasado en el Foro Expansión 2017.
El gobierno está dando prioridad al superávit primario para bajar los niveles de riesgo para la calificación crediticia, pero a costa de limitar la inversión en sectores relevantes como infraestructura, educación y salud, explicó Berrocal.
La SHCP, a cargo de José Antonio Meade, ha concentrado esfuerzos en generar un superávit primario en la cuenta pública, con el objetivo de que el país mantenga la calificación crediticia de BBB+, para garantizar el acceso en mejores condiciones a créditos y fondeo a través de bonos.
A finales del año pasado, esta calificación se vio en riesgo cuando Fitch, Standard & Poors y Moody´s pusieron en negativa la perspectiva, desde estable, y hasta julio pasado, las dos primeras la habían revisado nuevamente a estable.
Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto Público en México Evalúa refiere otros factores, por ejemplo, la falta de incentivos para invertir por parte del gobierno en su último año de mandato.
La baja en la inversión física, la cual se ocupa generalmente para la construcción de escuelas, hospitales, carreteras, puentes y gasoductos, es un problema que inició en 1998, cuando este gasto se descentralizó, explicó Campos.
“Desde ese momento no nos hemos recuperado, parte de la infraestructura se empezó hacer estatal para conceptos como equipamiento urbano e infraestructura social”, agregó Campos.
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Las caídas consecutivas son reflejo de los recortes al gasto público que iniciaron en 2015, a causa de la caída en los ingresos que obtiene el gobierno por producción y venta de petróleo, consideró Alejandro González, director de Gestión Social (Gesoc).
Ante la incógnita de cómo se impulsará el crecimiento económico en México frente a un menor nivel de recursos para la inversión física pública, José Antonio Meade, titular de la SHCP, ha expresado en distintos espacios que confía en que las reformas estructurales ayudarán a complementar esa reducción.
Se espera que las reformas estructurales "abran cada vez más espacios, para la participación privada en complemento a la pública", dijo el lunes pasado a medios después de participar en el Foro Expansión.