Ya se sabía, pero los datos vinieron a confirmarlo: el frenazo de los gobiernos a los permisos de construcción, como en la Ciudad de México, y el hundimiento de la inversión pública tienen en jaque al sector. Por ello, la industria sufrió en julio pasado su peor caída en términos anuales en 18 años, según las cifras que publicó hoy el Inegi.
El desplome del sector en julio fue del 9.1% anual, la peor bajada desde junio de 2001, cuando la contracción fue de 10.1%. Con esto, la industria acumula seis meses seis meses seguidos de contracción.