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¿Adiós a la alta inflación en 2020?

Economistas coinciden en que el alza de precios en el país se mantendrá dentro del blanco inflacionario de Banxico en los siguientes meses.
mar 11 febrero 2020 05:31 AM
Inflación economía
Expertos consideran que este año, la inflación en México se ubicará en niveles dentro del objetivo de Banxico, de 3% +/- un punto porcentual.

Del cielo al suelo. Así podría describirse la trayectoria de la inflación en México en los últimos meses. Sin embargo, aún falta determinar cuáles son las principales causas de este fenómeno, ya que, por un lado, se encuentra la labor del Banco de México (Banxico), cuyo mandato constitucional es garantizar la estabilidad de la moneda; y por el otro está el estancamiento económico por el que atraviesa el país.

En 2017, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) alcanzó una tasa anual de 6.7 %, su nivel más alto en por lo menos una década. La cifra cerró el 2019 en 2.83% y actualmente está en 3.24%, un nivel dentro del objetivo del banco central de 3% +/- un punto porcentual.

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Economistas señalaron que para tener una conclusión más amplia sobre la desaceleración de la inflación se debe incluir el comportamiento del tipo de cambio peso-dólar, a la inflación no subyacente y el impacto que han tenido en México temas externos como la guerra comercial de Donald Trump contra China y la incertidumbre generada por el futuro del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

“El efecto principal que está haciendo que la inflación esté muy cerca de la meta de Banxico ya por varios meses consecutivos, es el comportamiento de la inflación no subyacente”, afirmó Jessica Roldán, directora de análisis económico de Finamex Casa de Bolsa.

La inflación no subyacente que en enero se ubicó en 1.8% –representa el 25% de la inflación general-, y se compone por productos cuyos precios son volátiles y no responden a la política monetaria, como los energéticos, materias primas y productos agropecuarios, porque dependen de fenómenos meteorológicos, buenas cosechas o el clima.

“Si uno analiza la evolución de la inflación general, se puede dar cuenta que las disminuciones a la baja que ha registrado durante todo el año y se deben, casi en su totalidad, a este componente no subyacente que no se encuentra tanto en control del banco central ni de la política monetaria”, precisó Roldán.

El tipo de cambio también puede llegar a tener injerencia en la inflación: “Cuando ha generado depreciaciones importantes el peso (mayores a 40 centavos), se generan presiones inflacionarias también”, explicó Gabriela Siller, jefa de análisis económico-financiero de Banco Base.

Además de los temas domésticos, la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China ha tenido impacto en la demanda de bienes de la industria manufacturera, donde México es un jugador importante.

Shocks internacionales como la guerra comercial e incluso las negociaciones del T-MEC con Estados Unidos debilitaron más al Producto Interno Bruto (PIB) mexicano y esto, probablemente, ayudó a traer la inflación hacia abajo”, agregó Roger Aliaga-Díaz, economista en jefe de América Latina y director de Vanguard Investment Strategy Group.

¿Cómo pinta el 2020?

Hay coincidencias entre los analistas de que la inflación para del año estará entre 3% y 3.5%, aún dentro de la meta del banco central, sin que haya presiones inflacionarias, pero con la economía mexicana débil.

“La inflación no subyacente, que ha sido la muy bien comportada, va a comenzar a revertir un poco esa tenencia a la baja que trajo y a dejar de observar los niveles mínimos que tuvo en los últimos meses, pero este incremento tampoco va a ser tan pronunciado, lo que va a permitir que la inflación subyacente se mantenga en niveles de alrededor de 3.60%”, anticipó Roldán.

Para Siller la única presión inflacionaria para el 2020 será el tipo de cambio, pues “tampoco creemos que el precio del petróleo vaya a subir ni que la actividad económica vaya a crecer mucho”, sostuvo.

Además de la parte doméstica, se estima que la economía de Estados Unidos estará debilitándose, algo que necesariamente impactará a nuestro país.

“Tan cerca de Estados Unidos y tan lejos de Dios”, reza un refrán, o: “cuando a Estados Unidos le da gripe, a México le da pulmonía”, frase del ex secretario de Hacienda, Agustín Carstens.

“Por un tema de la estabilidad del peso, el banco central observa mucho lo que hace la Fed”, señaló Aliaga-Díaz.

En ese sentido, los tres economistas coincidieron en que Banco de México seguirá con el recorte en la tasa de interés, estimando de dos a tres recortes de 25 puntos. Recordemos que en 2019 el banco central realizó tres recortes.

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¿Mandato dual?

Agustín Carstens, actual titular del Banco Internacional de Pagos, inició el debate recientemente sobre si Banxico debe tener un mandato dual, es decir que además de la estabilidad de la moneda sus políticas estuvieran enfocadas a buscar la estabilidad del empleo, tal y como lo hace la Reserva Federal de Estados Unidos.

“El mandato dual no es necesario porque el hecho de que uno esté mirando la métrica de inflación no significa que se esté descuidando el desempleo. Básicamente están relacionadas”, señaló el directivo de Vanguard.

Desde hace un cuarto de siglo, Banxico tiene como única tarea la inflación por meta, o inflation targeting, algo que los expertos consideran tiene que mantenerse.

“Si la inflación está muy por debajo, probablemente es por una situación en la que el desempleo está bastante elevado, entonces estimular la economía para incrementar la inflación hacia las metas, también va a ayudar al desempleo”, expuso Roger Aliaga.

“El hecho de que un banco central, como Banco de México, tenga un objetivo de inflación no está peleado con el hecho de que la política monetaria tome en cuenta a la actividad económica, además el banco central no tiene las herramientas para alcanzar objetivos de crecimiento económico, pero sí puede, una vez que la inflación esté comportándose de manera ordenada, ser mucho más sensible a los números de crecimiento económico”, agregó Roldán, de Finamex.

El mandato dual, coincidieron Gabriela Siller y Roger Aliaga-Díaz, traería consecuencias en el mediano y largo plazos en la inflación.

“Si se llega a dar un mandato dual existirán riesgos para la inflación, no para el 2020 porque se espera que la actividad económica creciendo a tasas bastante moderadas, pero sí en el largo plazo”, comentó Siller.

“Los factores que han sido más complicados históricamente para nuestros países -México y Argentina- es que se puede reducir el desempleo, pero si lo haces de un modo que no es sostenible, más tarde empiezas con un proceso inflacionario que no puedes poner al genio de vuelta en la lámpara”, apuntó Roger Aliaga.

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