"La tendencia va hacia allá porque creemos que van a actuar en ese perspectiva negativa. Eso está ligado a la falta de crecimiento por un lado y por el otro a las perspectivas fiscales. La recaudación no ha venido nada bien salvo la del IEPS y eso le pone presión a las finanzas públicas", afirmó Capistrán.
Jessica Roldán fue más precisa y consideró que Moody's será la agencia que recorte la nota soberana de México en la primera mitad de 2020. Lo cual a su vez provocará un recorte a la calificación de Pemex, generando una presión “temporal” en el tipo de cambio peso-dólar.
“La merma en la confianza y la falta de claridad respecto al cambio en las reglas del juego en la economía han estado creando un ambiente que no es propicio para emprender proyectos de inversión”, señaló.
Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve por Más, comentó que México es susceptible al recorte a la nota soberana por el débil crecimiento económico que ha registrado y a la baja recaudación fiscal.
“Hay que recordar que las calificadoras tienen al país en perspectiva negativa, lo cual abre la posibilidad de baje la calificación de aquí a diciembre”, dijo.
Tras conocerse que la economía nacional tuvo su primera contracción para un año en la última década (-0.1%), las calificadoras Moody’s y Fitch expresaron sus preocupaciones sobre el desempeño de la actividad productiva del país.
"Si el sentimiento empresarial negativo persiste y la inversión privada sigue teniendo un rendimiento inferior, los ingresos del gobierno podrían quedarse cortos, lo que afectaría el resultado fiscal, ya que el presupuesto de este año se basó en un crecimiento económico anual del 2%", advierte Moody’s
Por su parte, Fitch señala que una de las preocupaciones en México es el bajo crecimiento económico respecto a otros países con niveles de ingresos y calificaciones crediticias comparables.
"Es difícil manejar unas finanzas públicas sostenibles si la economía no está creciendo", señala el analista soberano de la firma, Charles Seville, en una nota publicada por Reuters.
Pero el pesimismo no es general, pues también hay especialistas que ven menores posibilidades de que se concrete este escenario. Gabriela Siller, directora de análisis económico financiero de Banco BASE.
“Ya no vemos tanto riesgo a un recorte en la calificación crediticia. Si quisiéramos asignar una probabilidad sería como de 10 por ciento, es decir bastante baja y esa probabilidad nace de Pemex, en donde todavía existe un riesgo”.