Impulsar y recuperar lo Hecho en México a través de una política industrial que implemente el Estado es clave para que el país aproveche los cambios que vendrán con el Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (TMEC), que entrará en vigor el próximo 1 de julio, coincidieron este martes especialistas en el seminario económico Covid-19: un día después, organizado por la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Lo "Hecho en México" es una oportunidad con la entrada en vigor del T-MEC
“En los últimos 30 años no hemos tenido una política industrial con visión de producir y fortalecer a la industria nacional, esto ha generado una gran dependencia en la importación de bienes intermedios asiáticos que debemos disminuir para ser más competitivos, fortalecer la industria nacional, impulsar lo Hecho en México”, destacó José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).
Esto será clave para que México aproveche las nuevas disposiciones que vienen en el TMEC y que están enfocadas en fortalecer la producción regional, además cobra más relevancia al considerar que el Tratado es un elemento que puede contribuir a la recuperación económica, tras el paso del Covid-19, agregó el especialista.
“Las inercias económicas hoy están haciendo cambios estructurales importantes, Robert Lighthizer, representante comercial de Estados Unidos, habla de una política industrial como si nunca la hubiera tenido, va hacía más tarifas para la importación, más apoyo del Estado, México debe tomar toma de esto, acuse de recibo de su socio comercial”, dijo por su parte Arturo Oropeza, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El director del IDIC agregó que para que México cuente con una política industrial, ésta debe ser impulsada por el Estado con el objetivo de generar desarrollo social.
“Sin medidas adecuadas de política industrial es difícil pronta recuperación tras la pérdida de empleos y para las familias de estas personas, es un saldo de la crisis que sólo con el gasto social no alcanza”, comentó.
Para el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el T-MEC pude ser una oportunidad para apoyar el crecimiento de México.
“En un momento en que, para atender la contingencia de salud del Covid-19, hemos tenido que detener prácticamente todas las actividades del país, el reto económico autoinflingido se ha tornado en una crisis de dimensiones inimaginables. La entrada en vigor del T-MEC puede convertirse en una nueva etapa de certidumbre jurídica y reglas claras que apoyarán el crecimiento de nuestro país”, señaló el CCE en un comunicado a finales de mayo.