El director general de American Express, Santiago Fernández, dijo recientemente a Expansión que el mes más complicado para la empresa durante el confinamiento fue abril.
"Sin lugar a dudas, abril fue el mes de caídas más pronunciadas (...) y a partir de mayo empezamos una recuperación secuencial mes contra mes, pero ha sido lento", dijo.
S&P considera que en los siguientes 24 meses bajará la calificación de la empresa en caso de que los activos de American Express se deterioren por encima del promedio de la industria de tarjetas de crédito en México en 2021 y 2021.
"American Express Bank enfrentará durante los próximos dos años el reto de contener la calidad de su cartera y pérdidas crediticias en un entorno más adverso", añadió S&P. "Durante los siguientes 24 meses, el nivel de activos improductivos de AEB aumentará a niveles de 10% respecto al portafolio total, con castigos netos de cartera en torno a 10.5%, desde 5% y 8.3%, respectivamente, en 2019".
S&P considera que los indicadores de calidad de activos aumentarán por la caída en la demanda de crédito al consumo, ya que existe mayor prudencia en la facturación de los clientes, al igual que por el cambio en ciertos patrones de consumo.
"Aunque el perfil de cliente de AEB comúnmente cuenta con una fuerte calidad crediticia, consideramos que el deterioro en los indicadores de calidad de activos será inevitable", añadió la calificadora.
Durante el primer semestre de 2020, American Express reportó un aumento de 7% de activos improductivos de la cartera total de crédito, nivel superior al promedio de 4.2% en los últimos tres años.
Al cierre de junio de 2020, la empresa otorgó al 7% de su cartera programas de diferimiento como medida de apoyo ante la contingencia sanitaria en el país, este indicador es menor que el de la industria, en el segmento de tarjetas de crédito, con alrededor del 30%.
"Es importante destacar que más de la mitad de los clientes que solicitaron dicho apoyo lo hicieron de forma precautoria, puesto que continuaron realizando las amortizaciones correspondientes. Para aquellos clientes que sí difirieron su pago mensual, el banco constituyó una reserva adicional de 124 millones de pesos para afrontar posibles pérdidas crediticias", destacó S&P.