La banca mexicana lanzó un programa en marzo pasado con el que permitió a sus clientes diferir el pago de sus créditos.
Durante su participación, Juan Pablo Graf Noriega, titular de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), dijo que estas facilidades están por terminar, por lo que los bancos deben generar reservas que permitan hacer frente a posibles impagos de los clientes en los siguientes meses.
Luis Niño de Rivera, quien es el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), destacó que hay un billón de pesos en dinero prestado, mientas que los intereses que no se han cobrado a los clientes suman 69,000 millones de pesos.
"Estamos buscando la forma más inteligente de darle tiempo a nuestros acreditados porque nos vamos a encontrar tres tipos de acreditados: los que su situación económica no ha cambiado y cumplirán con su compromiso de pago puntual, los que han bajados sus ingresos y los que tienen que reconocer que tienen una situación difícil", dijo el presidente de la ABM durante el Summit de Expansión.
Niño de Rivera añadió que la banca está preparada para cuando el presidente López Obrador lance (en los siguientes días) los 140 proyectos de infraestructura; actualmente, la banca tiene 17% de su cartera en infraestructura.
"Podemos continuar haciendo eso, elevar el empleo y capacidad de consumo: ahí tendremos la reactivación del crédito relacionado a tarjetas de crédito, préstamos personales y bienes de consumo duradero", destacó el banquero.
El índice de morosidad de la banca se encuentra en 2.1%, las reservas son de 1.6 veces el monto prestado y una liquidez y cobertura de 200%.
Para Gerardo Esquivel, la crisis y las soluciones deben ser en tres dimensiones: la oferta, la demanda y un impacto social. Añadió que los apoyos que ha dado la banca comercial y de desarrollo, los apoyos que hizo el Banco de México así como su política monetaria deben ser vistos en con un seguro de desempleo para los mexicanos que han sido despedidos en el sector formal.
"El tema del seguro de desempleo que hace falta al país ayudará mucho (...) por la dimensión social porque parte de los efectos negativos de esta crisis tienen que ver con el impacto en los niveles de vida de todas aquellas personas que pierden su empleo y su ingreso", apuntó.
