El perfil "débil" de los siguientes meses está asociado a una base tributaria no petrolera comparativamente baja y a los riesgos no presupuestales provenientes de Pemex.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que la decisión de S&P beneficia tanto al sector público como privado ya que se mantiene el acceso al financiamiento en los mercados nacionales e internacionales en condiciones favorables.
S&P destacó que uno de los factores clave para fortalecer el crecimiento de México es tener una inversión privada más robusta.
"En este sentido, el Gobierno de México está trabajando con el sector privado de manera proactiva para reactivar la inversión. En las últimas semanas se han anunciado dos paquetes de proyectos de infraestructura por 2.3% del PIB. Además, con la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá se da mayor certeza a la inversión productiva", puntualizó Hacienda.
La decisión de S&P se suma a la ratificación de la calificación crediticia anunciada por la calificadora Fitch Ratings en noviembre pasado . Ambas agencias reconocen las políticas macroeconómicas prudentes y la solidez institucional del país.