La buena noticia: el gobierno federal implementa un programa de apoyo para que las micro, pequeñas y medianas empresas de México puedan sortear los efectos de la pandemia del coronavirus.
La mala noticia: han surgido intentos de fraude en contra de las personas que pretenden obtener este beneficio y que han encendido las alertas en la Secretaría de Economía (SE).
En mayo de 2020 se detectaron los primeros intentos de fraude que utilizan como gancho los créditos a la palabra.
“Hemos detectado un patrón que tiene dos características esenciales: hay una falsificación de la imagen institucional. Toman en sus comunicaciones el logotipo, los escudos oficiales del gobierno de México, incluso el logotipo del a Secretaría de Economía, en algunos casos bien hecho.
"Otro patrón importante es que ofrecen un crédito, incluso pre aprobado, por un monto importante, superior a lo que se otorga en los programas oficiales (25,000 pesos en el caso de créditos a la palabra) y, regularmente, piden como anticipo una cantidad pequeña que sea depositada en alguna cuenta”, explicó en entrevista Alejandro Rosas, titular de la Unidad de Prospectiva, Planeación y Evaluación de la SE, al tiempo de precisar que, con este modus operandi, han detectado alrededor de 30 variantes de este engaño.
Este año, además de continuar con la entrega de 20,000 apoyos a las empresas familiares que se registraron en 2020 en el censo del Bienestar, la SE otorgará 20,000 créditos a la palabra a mujeres empresarias y 20,000 más a empresas que cumplen con sus obligaciones fiscales.
El diablo está en los detalles, dice el refrán. De ahí la importancia de poner atención en varios aspectos para evitar ser víctimas de un engaño y, en este caso, perder dinero.
Los créditos a la palabra son por 25,000 pesos y la SE no pide ningún anticipo para entregar esta ayuda, el trámite es gratuito, no está demás repetirlo.
“Si es un monto mayor a 25,000 pesos, no es del programa de crédito a la palabra. Probablemente el gobierno de México de un crédito de más de 25,000 pesos, pero de crédito a la palabra no”, señaló Rosas.
También es importante revisar los datos de contacto. Los correos del gobierno federal terminan con @gob.mx.
“Si después del @ está el identificador de un servicio de correo electrónico privado -@gmail por ejemplo-, se trata con toda seguridad de un fraude. Todas las direcciones de correo oficiales son @gob.mx, si hay algo distinto, hay que andarse con mucho cuidado”, comentó Alejandro Rosas.
Otra señal de alerta tiene que ver con que, en caso de quienes se registraron en el censo del bienestar, no se les pide acudir a ningún lado para algún trámite. Los servidores de la nación los visitan en su domicilio o, en algunos casos, se les pide acudir a un centro integrador o delegación de la Secretaría del Bienestar estatal.
No esperes más y escúchanos:
En el caso de mujeres solidarias y empresas cumplidas el registro se hace en la página de mipymes de la Secretaría de Economía.
“No enviamos ni por mensaje, redes sociales o correo electrónico ligas para que entren a hacer su solicitud; se hace en mipymes.economía.gob.mx. Una vez hecho esto, la respuesta de la dependencia es positiva o negativa, sin nuevas ligas para registro.”, subrayó el titular de la de la Unidad de Prospectiva, Planeación y Evaluación de la SE.
En caso de recibir la visita de un servidor de la nación, ellos visten chaleco caqui con los logotipos del gobierno federal en color púrpura. Además, tienen una credencial que los identifica.
Si tienes duda sobre la visita de un servidor de la nación, puedes llamar a los números 55 5229 6260 o 55 5220 6264; además los correos electrónicos contaco.ciudadano@economia.gob.mx y reporte.apoyos@economía.gob.mx .
“Si te piden dinero, que entres a una liga o información privilegiada –contraseñas o algún otro dato sensible para los beneficiarios- seguramente es un fraude, así que hay que tener mucho cuidado y no proporcionar ni dinero ni datos sensibles”, insistió.
Hasta ahora la gente solo ha reportado intentos de fraude, reportándolos directamente con los servidores de la nación, así como en las redes sociales de la Secretaría de Economía o con las personas que operan los créditos a la palabra.
“No tenemos un número de personas que han sido víctima de estos fraudes porque no hemos recibido denuncias de personas que hayan hecho un depósito, sino de gente que lo ven como algo sospechoso y nos lo reportan”, explicó el funcionario de la SE.
En caso de que ya se haya hecho un pago, la denuncia tendría que realizarse ante la autoridad competente. Por ahora la SE no ha podido estimar un monto producto de estos engaños porque no se ha registrado denuncia alguna.
“La SE ha presentado 12 denuncias de hechos ante la Fiscalía General de la República (FGR) para que se inicien las investigaciones correspondientes. Son en tres tipos de ilícitos: falsificación de documentos públicos, usurpación de funciones públicas o por fraude en general”, dijo Alejandro Rosas, al precisar que aún no hay nadie señalado por dichos delitos porque las investigaciones están en proceso.
