Analistas consultados por la agencia Reuters estiman que la inflación en la primera quincena de junio será de 5.84% frente al 5.99% que se registro en la segunda mitad de mayo.
La inflación estaría repuntando ante el incremento en el precio de los alimentos, como la tortilla y algunos servicios. En cuanto a la inflación subyacente, se espera una tasa del 4.42%.
El gobernador del banco central, Alejandro Díaz de León, dijo recientemente que los elevados niveles de inflación serán transitorios y que cierre el año en niveles de 4.8% ante los choques de oferta así como por presiones en los precios de los productos agropecuarios y de los energéticos.
El Banxico ha evitado mover la tasa clave en sus últimas dos reuniones de política monetaria, citando los altos niveles de inflación.
Aunque no se espera un alza en la tasa, hay voces que apuntan a que Banxico debe comenzar pronto un ciclo alcista, como lo han hecho países como Brasil, Turquía y Rusia.
“Soy de los que piensan que el tema inflacionario en México no es transitorio y que ya debería actuar el Banco de México. Hay varios factores: uno es que varios países ya están enfrentando el choque de los commodities sobre su inflación. Segundo, luego de un pico de 6.1% de inflación en abril, el dato de mayo fue de 5.89%, lo que indica que una desaceleración del ritmo de crecimiento de los precios. Sin embargo, la inflación subyacente no, que creció de 4.3% en abril a 4.37% en mayo”, advirtió recientemente Jesús Garza, profesor del EGADE Business School del Tecnológico de Monterrey.
El jueves a las 13:00 horas locales, Banxico anunciará oficialmente su decisión de política monetaria.