El acuerdo, que establece un impuesto corporativo mínimo global de al menos el 15% y permite gravar a las empresas multinacionales más grandes en países donde venden productos y servicios, fue respaldado formalmente por el G20 el sábado.
"Creo que para nosotros esto es algo que debería ir sin problemas, porque va a ser una entrada neta de impuestos", dijo Herrera sobre la aprobación legislativa en México. "Y estos son impuestos relacionados con la actividad económica que ocurre en el país, pero actualmente, debido a la transferencia de ganancias, nuestra base se ve afectada".
México recaudaría unos 1,500 millones de dólares una vez se ponga en marcha el impuesto global, dijo este mes el subsecretario de Hacienda mexicano, Gabriel Yorio.
Se espera un acuerdo final sobre el gravamen corporativo en octubre, con lo que perdería por un mes las enmiendas anuales que México realiza a sus leyes tributarias. Esto significa que el Congreso mexicano probablemente lo ratifique en septiembre de 2022, dijo Herrera.
Los líderes financieros del G20 discutieron formas de aumentar el acceso a las vacunas contra COVID-19, pero no anunciaron nuevos compromisos importantes en Venecia. También expresaron su preocupación por la propagación de nuevas variantes que suponen un revés para la recuperación económica.
El sistema COVAX es una decepción
Herrera dijo que debería haber una nueva opción multilateral para que países en desarrollo reciban más vacunas, además del esquema de distribución COVAX, que calificó como una decepción.
De las 254 millones de dosis de vacunas adquiridas por México, más que suficientes para vacunar a su población, la mayor parte fue a través de COVAX.
Herrera tenía grandes esperanzas de una entrega sin problemas, pero hasta hace un mes "la gran mayoría de las vacunas recibidas no eran COVAX", dijo, y agregó que estas provenían directamente de AstraZeneca, Pfizer-BioNTech, CanSino, Sputnik y Johnson & Johnson. "COVAX es una gran idea, pero se ha implementado mal", agregó.
Herrera, quien pronto dejará de ser secretario de Hacienda para convertirse en el jefe del banco central del país, también dijo que cree que la inflación está bajo control.
"Necesitamos estar atentos, pero somos razonablemente optimistas de que la mayoría de los movimientos en los precios serán temporales", dijo.