Entre los ajustes al alza está la recuperación de Estados Unidos y China con expectativas de 6.9% y 8.4% para 2021, explicó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL.
Otros alentadores del PIB son los efectos positivos derivados de la demanda externa y el alza en los precios de los productos básicos (commodities) que exporta la región, así como por aumentos en la demanda agregada.
La economía de México crecerá 3.2% en 2022, dejando atrás los efectos de baja comparación, explicó la ejecutiva.
Por ello recuperar la inversión y el empleo especialmente en sectores ambientalmente sostenibles es clave para una recuperación transformadora e inclusiva, señaló Bárcena.
“Existen importantes asimetrías entre los países desarrollados y las naciones de ingreso medio -entre las que se encuentran la mayoría de los países de América Latina y el Caribe- tanto en la dinámica de la vacunación, como en la capacidad de implementar políticas para la recuperación económica”, indicó Alicia Bárcena.
El organismo refirió que los problemas estructurales que por décadas han limitado el crecimiento económico de la región se agudizaron producto de la pandemia y limitarán la recuperación de la actividad económica.
Antes del COVID-19 la región venía con una trayectoria hacia el estancamiento: en el sexenio entre 2014 y 2019 creció a una tasa promedio de 0.3%, menor al promedio del sexenio que incluye la Primera Guerra Mundial (0.9%) y el de la Gran Depresión (1.3%).
Además muestra una caída progresiva en la inversión, alcanzando en 2020 uno de sus niveles más bajos en las últimas tres décadas (17.9% del PIB). De igual forma, la productividad laboral cae significativamente, agregó la Cepal.
Con información de Reuters.