Banco de México (Banxico) elevó la semana pasada por tercera ocasión consecutiva la tasa de interés de referencia en 25 puntos base, a un 4.75%. La entidad también actualizó expectativas para el índice de precios al consumidor y proyectó que alcanzaría su objetivo en el tercer trimestre de 2023.
En línea con la encuesta de Reuters, el índice de confianza del consumidor, en cuanto a la inflación se refiere, mostró que los mexicanos tienen dudas por el comportamiento de futuro de los precios
La próxima decisión de política monetaria, la penúltima de un total de ocho en el año, está programada para el 11 de noviembre. Banxico tiene una meta permanente de inflación del 3% más/menos un punto porcentual.
Sólo en septiembre, los precios al consumidor habrían crecido un 0.60% según la encuesta de Reuters, mientras que para el índice subyacente la mediana de las proyecciones arrojó un 0.47%.
En cuanto a la inflación subyacente a tasa anual, las estimaciones indican que avanzaría a un 4.94%, su mayor nivel desde agosto de 2017.
Sobre el comportamiento de los precios en México, el gobernador de Banxico, Alejandro Díaz de León, comentó en entrevista a Expansión que no será sencillo lograr que la inflación regrese a la meta de 3% a través de aumentar la tasa de interés de referencia, por dos motivos:
"Uno es este proceso de aumento en la inflación global que está afectando a todas las economías, tanto emergentes como avanzadas, particularmente Estados Unidos. Y otro de los retos es el de las acciones de política monetaria por parte de la Reserva Federal (el Banco Central de Estados Unidos). Han comenzado a señalar que podrían reducir la compra de activos en lo que resta de este año y hacia mediados del año que entra, lo cual va a significar un reacomodo en los portafolios a nivel global e inclusive una apreciación del dólar", dijo Díaz de León.
El gobernador del banco central agregó que se dio un redireccionamiento del gasto hacia las mercancías, gastando menos en servicios, lo que provocó cuellos de botella en la producción. "Estas consideraciones han dado lugar a estas presiones inflacionarias. Todos estamos conectados, y las interrupciones en la producción y en el suministro del otro lado del mundo, como el caso de China, han tenido un efecto en nuestro país", señaló.
El aumento del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se habría visto impulsado por incrementos de precios en productos agropecuarios, sobre todo frutas y verduras, además de energéticos, entre ellos el gas LP.
A pesar de la política de precios máximos para el gas LP que implementó el gobierno federal, a través de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), en la primera quincena de septiembre el energético, luego de una disminución en agosto, tuvo un incremento de 2.26% y el índice de precios al consumidor se ubicó en 5.87% en la primera mitad del mes patrio.
El instituto de estadística divulgará el jueves el comportamiento del índice de precios durante septiembre.