Se estima que la obesidad en la población mexicana seguirá en aumento y que para 2050 el 88% de ésta tendrá algún grado de sobrepeso u obesidad.
Además, en caso de que no se tomen medidas urgentes en todos los niveles de la sociedad, se proyecta que el costo por este problema de salud pública pueda elevarse hasta un 4.67% del PIB para 2060.
El estudio piloto, que se llevó a cabo en ocho países en 2019, descubrió que un índice de masa corporal (IMC) elevado de la población tuvo gran impacto económico.
Los resultados fueron calculados tomando en cuenta los costos directos, como los de atención a la salud y los asociados al desplazamiento para buscar asistencia, así como los indirectos, relacionados con la mortalidad prematura y el ausentismo laboral.
“Se comprobó que los costos indirectos representan el 65 por ciento del impacto total”, precisó.
De acuerdo con los resultados, en 2019 la obesidad le costó a México 26 mil millones de dólares, que equivale al 2.1 por ciento del PIB, es decir, 204 dólares per cápita.
Mientras que para el 2060 se proyecta que los costos aumenten a más de 159 mil millones de dólares, lo que representaría 4.67 por ciento del PIB.
Ricardo Luna, presidente fundador de la Sociedad Mexicana de Obesidad, aseguró en el comunicado que estos datos sirven también para combatir el estigma que rodea a la obesidad.
Añadió que las personas que viven con obesidad son las más vulnerables al impacto económico gradual, tanto de la atención médica, como de los gastos médicos directos e indirectos derivados de esta enfermedad.
“Si examinamos colectivamente, necesitamos a más profesionales de la salud involucrados en el abordaje de la obesidad antes de que se presenten las comorbilidades generadas por la misma”, precisó.