“En el contexto de la canícula, la época más calurosa del año, hay cierto tipo de marcas de cerveza, principalmente en playas y costas, en el norte: Tepic, Chihuahua, Sonora, Sinaloa”, detalla Rivera, de la ANPEC, pero aclara que el llamado no es para generar pánico sobre un posible desabasto, como el que se vivió durante la pandemia con productos como el oxígeno, el papel higiénico, el agua embotellada y la cerveza en ciertas presentaciones..
En realidad, la ANPEC está haciendo un “llamado preventivo” para que el consumidor final siga teniendo acceso a productos de primera necesidad en un contexto de pandemia y presiones inflacionarias.
El cambio climático afectó la producción de aguacate y limón, por la falta de agua. Algunos supermercados, incluso, no sacaron al mercado ciertos productos como estos porque son muy caros para la población y simplemente no se venden. Así se manifiesta una relativa escasez provocada por la inflación, explica el doctor en economía y profesor de la Universidad La Salle, Antonio Andrade.
Pero la escasez no solamente es ocasionada por cuestiones climáticas o falta de insumos. Existen otros dos factores, la reduflación y la inseguridad.
Reduflación, sustitución y pérdida de calidad
Una de las estrategias que están siguiendo las grandes marcas para conservar sus volúmenes de ventas, en un escenario de alta inflación, es que ya no ofrecen las mismas presentaciones de productos que antes. Ahora, exhiben presentaciones más pequeñas, a un precio aparentemente más bajo que las presentaciones estándar anteriores al fenómeno inflacionario.