México es autosuficiente en maíz blanco, pero eso no basta para detener el precio de la tortilla. De hecho, uno de sus problemas más urgentes no tiene que ver con aranceles o impuestos, sino con la inseguridad en la que viven y producen las tortillerías de todo el país, señaló Homero López del Consejo Nacional de la Tortilla.
Es cierto que el gas, la harina, el maíz y el papel –cuya materia prima, la celulosa, se debe importar- han aumentado los costos de los productores, reconoció el industrial, pero para él el problema más urgente tiene que ver con el crimen organizado, el cobro de piso y el control de la cadena productiva por parte de los delincuentes en algunas regiones del país.