En el caso de Argentina, la organización internacional con sede en París, a la que Buenos Aires solicitó su adhesión, estima que la economía del país sudamericano se contraerá un 1.8% en 2023 y 1.3% 2024, antes de volver a crecer 1.9% en 2025.
La inflación, por su parte, progresará del 124% este año al 157.1% en 2024, antes de reducirse al 62.4% al año siguiente, según el informe.
"La economía argentina se enfrenta a desafíos extremos en este momento", aseguró en rueda de prensa la economista jefe de la OCDE, Clare Lombardelli, en referencia a la inflación y a los "elevados" índices de pobreza.
Preguntada sobre los planes de Milei para la economía, entre ellos la dolarización, Lombardelli aseguró que la "prioridad" del nuevo gobierno debe ser "reducir la inflación y aumentar la estabilidad macroeconómica".
"Esperamos que se centren en la estabilidad macroeconómica, en la consolidación fiscal para reequilibrar la economía y que piensen en la eficacia del gasto social y en otras reformas que puedan hacer para aumentar el crecimiento", agregó.
El informe señala que "aumentar la protección social mediante un gasto social más eficaz podría contribuir a reducir la pobreza y las desigualdades".
Pero advierte a su vez que "la necesidad de reducir el gasto público con relativa rapidez en medio de crecientes presiones sociales podría provocar inestabilidad política".
La OCDE también aboga por una mayor participación de las mujeres en el mundo del trabajo para reducir la pobreza e impulsar la expansión económica.