Moody's Analyctics proyecta que la economía de México y Brasil se desacelerarán después de desempeños destacados en los últimos dos años.
La expectativa de crecimiento para México es de 2.4% para 2024 y de 1.5% en 2025.
La de Brasil es de 2% en 2024 y 2.5% en 2025.
De acuerdo con la subsidiaria de Moody's Corporation, mientras México y Brasil se desacelerarán, las grandes economías andinas: Chile, Colombia y Perú, se están recuperando después de una mala racha que duró un año.
El grupo de análisis de Moody´s apunta que México y Brasil han tenido un desempeño muy bueno porque la reestructuración de las cadenas de suministro globales ha favorecido lo que mejor saben hacer.
En México, se trata de bienes manufacturados para exportar a Estados Unidos, y en Brasil de la canasta completa de productos básicos del mercado.
En el caso de México, explica que si bien sus exportaciones a Estados Unidos y los ingresos por remesas aún están alcanzando récords, se espera que estos dos apoyos clave para la economía del país cambien a medida que el mercado laboral estadounidense se desacelere gradualmente.
También se reducirá el gasto público, ya que la administración mexicana entrante prevé un menor déficit fiscal.
"Donde esperamos que continúe el impulso es en el frente de la inversión. Si bien no es suficiente para evitar una desaceleración más amplia, la inversión extranjera directa en el sector manufacturero de México está alcanzando su nivel más alto en 10 años a medida que los fabricantes globales continúan buscando una alternativa a China", señala Moody's Analytics.
Respecto a las próximas elecciones estadounidenses, se ve una fuente de incertidumbre, ya que si una nueva administración impusiera aranceles elevados y políticas de inmigración más restrictivas, las consecuencias para América Latina podrían ser significativas.
El candidato de los republicanos, Donald Trump, se ha pronunciado por imponer aranceles de más de 10% a todas las importaciones .
Los impactos se concentrarían más en México, donde la reducción de las importaciones estadounidenses, una reducción de la migración mexicana a Estados Unidos y la reducción de las remesas pondrían a la economía mexicana en un aprieto.
Según las estimaciones que el PIB de México disminuiría con este medida casi 0.7 puntos porcentuales.
