El creador del avión solar busca 1,000 emprendimientos sustentables
Bertrand Piccard tardó más de una década en crear un avión capaz de dar la vuelta al mundo impulsado solo por la energía solar, hazaña que concretó en 2016. Ahora, el emprendedor suizo está al frente de una nueva cruzada: reunir 1,000 soluciones de energía limpia que pueda presentar a gobiernos e inversionistas y, para ello, vino a buscar algunas al ecosistema emprendedor mexicano.
De la mano de GreenMomentum, organización que promueve el desarrollo de tecnologías limpias y modelos de negocios sustentables, Piccard conoció iniciativas mexicanas como Kinetech Power Systems, que desarrolló una solución para el almacenamiento de energía; Fungicel, la cual utiliza residuos orgánicos para transformarlos en un sustituto biodegradable del unicel, y Xilinat, que produce un endulzante hecho con residuos de maíz que ayuda a prevenir la diabetes y la obesidad.
Piccard, quien es presidente de la Fundación Solar Impulse, se fijó un plazo de 18 meses para reunir las iniciativas que planea presentar en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2018, en diciembre próximo. A la fecha, ha reunido 500 proyectos -aún por validar.
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Para que los emprendimientos mexicanos a favor del medio ambiente logren el impacto positivo que planean, Piccard recomienda lo siguiente:
- Hablar el lenguaje de los negocios
Los emprendedores que están creando soluciones para un planeta limpio deben aprender el lenguaje de los negocios de las empresas, de cómo sus propuestas ayudan a generar beneficios económicos, de lo contrario no atraerán la atención de inversionistas y clientes.
“Es la única forma de poder trabajar: hablando su lenguaje, sin filiación política y siempre pensando en la industria”, dice el experto.
- Unirse para impulsar la regulación
Piccard considera que la reforma energética aprobada en 2013 en México fue un buen paso para producir energía de mejor manera, pero ahora hace falta otra regulación para establecer cómo usarla y sacar provecho de ella. Por ejemplo, prohibir los calentadores de agua tradicionales para fomentar el uso de los eléctricos o solares.
Para ello, los emprendedores y ambientalistas deben actuar como gremio y hacer alianzas con los tomadores de decisiones a fin de crear los incentivos necesarios para que contaminar deje de ser legal.
“Mientras siga siendo legal contaminar, esto no va a cambiar. El rol de los reguladores es cambiar la industria y crear los incentivos necesarios para que estas soluciones lleguen al mercado y dejemos de hacerlo”, señala.
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- Pensar diferente
En el proceso de crear el avión solar, Piccard enfrentó diversos retos -como el peso de la nave y el rendimiento de las celdas solares- para los que la industria de aviación no tenía respuestas.
Para solucionar los desafíos, el presidente de la Fundación Solar Impulse reunió en Suiza a un grupo de empresas que trabajaran en equipo por un fin común. La idea resultó favorable, en conjunto decidieron utilizar un material más ligero y maximizaron la potencia de las celdas para volar día y noche.
“Todos somos prisioneros de los que hemos aprendido, somos víctimas de estas mismas creencias y lo más importante es hacer las cosas de distinta manera, encontrar el paradigma de aquello que estás pensando y luego reflexionar cómo lo puedes romper”, comenta el piloto suizo. “Cuando estás volando, llega un momento en el que ya no puedes avanzar como lo estás haciendo, debes deshacerte del lastre para encontrar nuevos vientos que te cambien de altitud y te lleven en la dirección correcta”.
