Hilton estrena su segundo hotel Curio en Guadalajara
Guadalajara fue una de las principales sedes del Mundial de Fútbol de México de 1970, que causó un 'boom' en aperturas de hoteles para hospedar equipos y aficionados. El hotel Posada Guadalajara nació aquel año, y entre sus primeros inquilinos estuvieron la selección brasileña y Pelé. Ahora, tras año y medio de remodelación, ese hotel se suma a la cadena Hilton bajo la marca Curio.
La cadena hotelera Hilton anunció a finales de 2016 la llegada de su marca hotelera Curio a México. El primero de tres hoteles previstos abrió el año pasado en Playa del Carmen, Quintana Roo, al que se suma éste de Guadalajara, llamado Hotel 1970 Posada Guadalajara, con una inversión de alrededor de 9 millones de dólares para su renovación.
Lee: Hilton va por ocho hoteles Todo Incluido en Latinoamérica
El hotel fue fundado por Luis Romero y ahora es propiedad de sus dos hijos, quienes hace un par de años decidieron sumarlo a Hilton sin perder el legado que había fundado su padre. El inmueble se edificó alrededor de un gran patio central donde yacía una alberca con una fuente en medio, cantera y mármol en los acabados, y los nuevos propietarios buscaron que siguiera siendo reconocido como aquel gran ícono de los tiempos de Pelé, aunque formando parte de un grupo internacional.
Para sumarse a la colección Curio, se ejecutó una inversión de alrededor de 55,000 dólares por habitación, dijo Carlos Santos, gerente general del hotel. La remodelación fue integral en las 160 habitaciones, y se incluyeron marcos de cantera en las puertas de las habitaciones, se retiró la alberca central y en su lugar se instaló el restaurante. El diseño arquitectónico estuvo a cargo del despacho Santoscoy.
El operador es Trust Hospitality. “Es una firma basada en Estados Unidos y que opera más de 30 hoteles allá, en México y en Latinoamérica. Entregamos la operación a una firma con más de 40 años operando hoteles, con el know how y una estructura robusta de mercadeo y operaciones, para lograr el beneficio común, que es la satisfacción de los huéspedes y utilidad y rentabilidad para los propietarios”, destacó Santos.
Recomendamos: El operador hotelero que quiere poner de moda los Todo Incluido
El hotel busca captar el nuevo segmento de 'bleisure', que conjuga el turismo de negocios con el de ocio. “Hay huéspedes que han probado el cambio, y les ha gustado. El nicho cambió drásticamente, y estamos en esa evolución, que durará un año, para que las personas que por tradición se hospedaban aquí prueben el nuevo concepto”, dijo Alejandra Ibarra, directora de Ventas de Hotel 1970.
Las ventajas de dejar de ser independiente
Para Posada Guadalajara, sumarse a la familia Curio, de Hilton, permitió ampliar su abanico de potenciales huéspedes y mejorar sus métricas operativas.
Previo a la remodelación, durante la cual el hotel no dejó de operar, la propiedad tenía una ocupación promedio de 65%, con una tarifa de 1,000 pesos por noche. “Para el producto que era, estaba ideal, tenía buenos momentos con las convenciones en la ciudad, era un hotel que venía bien”, explicó Santos.
Pero se trataba de “un hotel cansado y rezagado”, según el directivo, por lo que decidieron sumarlo a Curio. “Hoy, en el mundo globalizado y de tantas marcas hoteleras, se complica un poco la operación para hoteles independientes que no se suman a banderas o a grandes compañías y por eso se tomó la decisión”, agregó.
Ahora, bajo Curio, Hotel 1970 estima llegar en su primer año a una ocupación de 70% con tarifas que van entre 100 y 260 dólares por noche.