Representantes de Morena: "La reforma energética no se echará para atrás"
¿Suprimirá el gobierno la reforma energética? Esta duda ha causado noches de insomnio en el sector petrolero, pues las señales han sido ambiguas. En enero, Andrés Manuel López Obrador incluso pidió una disculpa pública a quienes apoyaron la nueva legislación del sector, por producir "una crisis" en la producción de petróleo de Pemex.
Pese a ello, el nuevo mandatario se ha comprometido a dos cosas muy claras que han dado un cierto respiro al sector: dijo que los contratos derivados de las rondas petroleras se respetarán, y que no se harán cambios legales que afecten a la reforma en los próximos tres años.
Este miércoles, en un encuentro organizado por Expansión con políticos, reguladores, empresarios y expertos en energía, los representantes de Morena, y líderes de las Comisiones de Energía tanto en la Cámara de Senadores como en la de Diputados, mandaron otro mensaje de calma: destacaron que la reforma energética, y la participación de las compañías privadas en la extracción de hidrocarburos, son necesarias para alcanzar los objetivos de AMLO, como aumentar la producción petrolera del país y mejorar las finanzas de Pemex. La reforma, afirmaron, "no se va a echar para atrás".
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“Se necesita a la IP nacional y extranjera para sacar lo del petrolero y lo de la industria eléctrica”, dijo Armando Guadiana, senador por Morena y presidente de la Comisión de Energía en el Senado. Y Manuel Rodríguez, presidente de la Comisión de Energía en la Cámara de Diputados, añadió que tanto Morena como el propio López Obrador tienen la apertura de escuchar otros puntos de vista, recibir a los empresarios y especialistas del sector, e incluso cambiar de opinión si es necesario.
Una muestra se dio hace unos días, cuando los legisladores de Morena decidieron frenar una iniciativa de cambios a las leyes de Pemex por parte de este mismo partido que, desde su perspectiva, iba a dar más agilidad a la toma de decisiones de la petrolera, concediendo más poder al director general. Ante el rechazo a la propuesta del sector energético, entendieron que la medida podía generar más incertidumbre y la frenaron.
“Mi impresión es que el presidente llegó con buenas intenciones, pero con una carga impresionante de prejuicios por todo lo que ha pasado. (...) En la medida en que se vaya haciendo el tiempo para conocer más las cosas, verá que hay muchas buenas”, dijo Julen Rementería, senador por el PAN y también miembro de la Comisión de Energía.
Paciencia y entendimiento
Las calificadoras internacionales han reiterado que las inversiones que hará Pemex este año, con casi 11,000 millones de dólares, son destacables pero insuficientes , y afirman que no alcanzarán siquiera para evitar que caiga la producción de petróleo. El encuentro organizado por Expansión puso en evidencia que la petrolera nacional necesitará la ayuda de otras empresas, mexicanas y extranjeras, para alcanzar sus objetivos.
Sin embargo, ha faltado que este mensaje llegue con claridad a todo el Ejecutivo, señaló Alberto de la Fuente, director general de la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (Amexhi), que agrupa a las principales firmas del sector petrolero, y presidente de Shell en México. El esfuerzo sí se ha hecho con el presidente, añadió, pero no con la Secretaría de Energía (Sener). “Reconozco que por el lado de la Secretaría de Energía ha sido difícil. No hemos tenido como industria un acercamiento con la Secretaría”.
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Según De la Fuente, los petroleros privados han asumido el reto de aportar para finales del sexenio cerca de 280,000 barriles, en promedio diario, a la producción total del país —que ahora ronda los 1.7 millones de barriles— . Pero requieren paciencia para que se vean estos resultados y más licitaciones para aumentar esta proporción en el futuro. “Vamos a perforar 131 pozos en los próximos cuatro años. Pero en los últimos dos años no va a haber actividad exploratoria, si no siguen las rondas”, aseguró el representante de la industria.
Además, el mercado va a requerir de reguladores independientes y fuertes para asegurar la transparencia y el piso parejo entre Pemex y los competidores del mercado.
“Hoy, con los instrumentos que da la reforma, Pemex se puede asociar y no meterle dinero a todo, porque además no le va a alcanzar”, dijo Martín Álvarez Magaña, titular de la Unidad de Contrataciones de Actividades de Exploración y Producción de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Los asistentes a la plática también coincidieron en que López Obrador puede lograr algo que ningún otro presidente consiguió, al menos en épocas recientes: transformar de fondo la estructura de Pemex. “Esta es una gran oportunidad para un gobierno que tiene una gran capacidad de comunicar políticamente, como ningún otro gobierno, y de entrarle a temas estructurales que quizá tenían un costo político muy fuerte”, comentó Severo López, socio senior de la consultora Galo Energy.
Los asistentes terminaron el encuentro con la certeza de ver que tienen posiciones cercanas en varios temas, a pesar de venir de la oposición, la iniciativa privada, el regulador o el partido del presidente. Los puentes ya están construidos, y parece que sólo cuestión de cruzarlos para hacer un frente común en el sector energético que beneficie a todos.
