El grupo aéreo europeo IAG, del que forman parte Iberia y British Airways, firmó una carta de intenciones con el fabricante estadounidense Boeing para incorporar 200 aviones de la familia 737 MAX, su modelo de avión que estuvo involucrado en dos accidentes que dejaron 346 muertos.
Este anuncio tiene lugar mientras Boeing está a la espera de una autorización por parte de los reguladores aéreos para que el 737 MAX reanude los vuelos.
La compra sería la primera de la familia 737 MAX desde que en marzo se prohibió volar a estos aviones en Europa, Estados Unidos y otros países tras el accidente registrado en Etiopía, que se sumó a otro anterior ocurrido en el mar de Java en octubre de 2018.
En esos accidentes murieron 346 personas y fueron, aparentemente, causados por el software de control de vuelo. La compañía estadounidense ha señalado que ya ha corregido el error y que está lista para volver a poner al avión en el aire.
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Desde el accidente, en marzo, el precio de las acciones de Boeing han caído 13%, lo que supone una pérdida de más de 26,000 millones de dólares en su valor de mercado. Tras al anuncio de la intención de compra, el precio de sus títulos subía 4.2% a 369.8 dólares.
"Tenemos plena confianza en Boeing y esperamos que el avión retorne exitosamente a operar sus servicios en los próximos meses tras haber recibido la aprobación por parte de los reguladores", dijo en un comunicado Willie Walsh, consejero delegado de IAG.
El grupo señaló que la adquisición está sujeta a un acuerdo formal. Al precio de catálogo, esta operación ascendería a unos 24,000 millones de dólares, según Boeing, aunque IAG dice haber negociado un descuento sustancial.
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Los aparatos, de los modelos B737-8 y B737-10, se entregarían entre 2023 y 2027 y serían operados por las compañías British Airways, Vueling y Level.
Con información de EFE y AFP.
