La transformación digital en el mundo de los pagos impone un reto tan alto como el Everest. Por ello, para emprender la evolución con éxito, las empresas del sector deberían fijarse en cómo suben los alpinistas el pico más alto del mundo, dijo
, durante el Expansión Summit 2019 que se celebra este lunes en la Ciudad de México.
Carroll destacó ese camino a la cima como un ejemplo del que las empresas pueden aprender
"Somos los 'sherpas' en el proceso, hemos visto lo que ha sucedido en el mundo de los pagos desde hace 50 años", señaló, Carroll en la conferencia 'Sistemas Financieros, el futuro fue ayer'.
Un 'sherpa' en el alpinismo es el guía que ayuda al escalador a subir el pico aportando sus consejos, basados en la experiencia de numerosos fracasos y éxitos previos.
Eso, en el mundo de los negocios y del sistema financiero, es clave para el desempeño futuro de las compañías, consideró Carroll, que ingresó a Mastercard en 2014.
En este sentido, el ejecutivo destacó la labor de Mastercard Labs, un servicio de consultoría especializado en Innovación de Producto y Transformación Digital para los clientes de Mastercard a nivel global.
Sin embargo, la innovación tecnológica implica peligros y retos, por lo que Carroll sugirió a las empresas mexicanas y del mundo que reformulen sus preguntas, aprendan realmente del fracaso y "no suban solos esa montaña". "(Antes de llegar a la cima) hay mucha competencia (...) y muchos peligros", advirtió, empleando imágenes del Everest como fondo de su conferencia.
¿Qué enseñanzas se pueden extraer de la actividad de los alpinistas? Según Carroll, llevadas al terreno de las empresas y su tránsito al futuro tecnológico, son: planear, colaborar, mirar cómo suben los otros y ayudarse mutuamente, y consultar a su 'sherpa'.
Carroll explicó que los alpinistas no se plantean subir de una sola vez a la cima, sino que lo hacen poco a poco: suben al primer punto, a veces regresan, vuelven a intentarlo, y así hasta alcanzar la meta. "Cuando llegas a un cierto punto, a veces es mejor regresar e intentarlo de nuevo", dijo.
Por ello, las empresas como Mastercard ayudan a otras compañías a analizar los riesgos, planear su ascenso y revisar lo que creen haber aprendido. Incluso hablan de sus fracasos. "De esos errores uno puede aprender hacia el futuro".
Carroll finalizó con una invitación a los directivos del sector a tener la curiosidad de un niño para hacerse las preguntas correctas para subir la montaña. "Regresemos al niño curioso al ver a nuestra compañía", pidió.