Los días de ir a despedir o recibir a un conocido al aeropuerto podrían quedar atrás, como parte de las medidas que la industria aérea está valorando para operar de manera segura una vez que los vuelos comiencen a repuntar. Las aerolíneas contemplan un plan de prevención desde que el pasajero hace su check-in hasta que pasa los filtros de migración.
Las aerolíneas estudian limitar el equipaje de mano y el acceso a terminales
Entre las medidas que la industria propone ante el COVID-19, está el uso de cubrebocas para entrar a los aeropuertos y durante todo el vuelo.
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Alejandro Restrepo Marino, gerente de seguridad y facilitación para las Américas de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por su sigla en inglés), explicó que las aerolíneas han trabajado un plan con medidas que ya existen y a diferentes niveles, que la organización considera realizables de manera temporal.
Con el objetivo de evitar el contacto entre personas al máximo –ya sea entre pasajeros o trabajadores de la aerolínea y del aeropuerto–, se buscará generalizar procesos como el web check-in, además de exhortar que los usuarios hagan su propia documentación a través de sistemas self-service bag drop, así como limitar el acceso a los aeropuertos.
“El acceso a las terminales debe ser restringido, y esto significa sólo permitir a los trabajadores del aeropuerto y a pasajeros que tengan su pase de abordar en mano, así como a los acompañantes de menores y de personas con capacidades diferentes”, dijo en videoconferencia de prensa.
Parte de los requisitos también contempla el uso de cubrebocas tanto para acceder al aeropuerto, como durante todo el vuelo, una medida que IATA también ha impulsado con el objetivo de evitar otras medidas como dejar asientos vacíos entre pasajeros, que encarecería los costos operativos de las aerolíneas y, por consiguiente, los boletos de avión, hasta un 54%.
Los pasajeros deberán llegar con sus propios cubrebocas en la mayoría de los casos, aunque dependerá de las particularidades que se trabaje con cada gobierno, agregó la Asociación.
Durante el vuelo, las aerolíneas buscarán mantener un distanciamiento físico, por lo que el equipaje de mano a bordo podría limitarse para evitar el contacto entre pasajeros mientras se guarda, y también se buscará reducir el movimiento de usuarios en cabina.
Para el reclamo de equipaje se trabajará para mantener estándares de distanciamiento y se exhortará a los gobiernos a digitalizar procesos migratorios para evitar el contacto entre personas, todo esto sólo cuando sea necesario, por lo que no serían medidas permanentes, apuntó Restrepo Marino.
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