Aunque Liverpool quintuplicó sus ventas en línea durante la contingencia sanitaria, lo que le ayudó a generar ingresos por 11,767 millones de pesos, parte de este dinero se destinó a pagar a proveedores externos que se encargaran de hacer las entregas, ya que la infraestructura con la que contaba la empresa solo le permitió cubrir el 13% de los envíos.
La logística fue uno de los tres retos que enfrentaron las empresas en medio de la contingencia sanitaria, además de la bancarización de los clientes y el acceso a internet.
Miguel Peña, director de Producto y Marketing para Element Fleet Management México, una multinacional dedicada a la administración de flotillas, explica que las empresas tuvieron dos alternativas en medio de la explosión de las ventas en línea: contratar a proveedores externos para poder cubrir la demanda o incrementar su flota. “Pero muy pocas están incrementando su flota porque es un compromiso a largo plazo, además de que requiere un importante desembolso”, dice.
En medio de la explosión de las ventas en línea, muchos retailers empezaron a contratar a proveedores externos para que se hicieran cargo de las entregas. Liverpool lo hizo. La Comer y Walmart también. Aunque las tres empresas ya llevaban algunos años avanzando en sus canales de venta en línea, no estaban listas para, de una semana a otra, atender una demanda tres o cinco veces mayor a la que venían atendiendo en las semanas previas a la contingencia sanitaria, y, en algunos casos con menor personal.
Liverpool, por ejemplo, redujo su plantilla logística “por temas relacionados con el COVID-19”, en un momento en el que el volumen de entregas incrementó 400%. “La pandemia ha representado un reto importante para el área logística: el 100% de las ventas se convirtieron en entrega a domicilio ante el cierre de las tiendas y de los módulos Click & Collect”, informó la compañía en su reporte trimestral a la Bolsa Mexicana de Valores.
También las ventas de e-commerce de Palacio de Hierro crecieron en más de 300%, convirtiéndose en el canal más importante de venta en el trimestre. “La emergencia sanitaria del COVID-19 catalizó la migración del público a plataformas digitales. Esto le generó a diversas empresas un reto sin precedentes que puso a prueba su capacidad de respuesta”, señaló la firma en un comunicado.
Las empresas se tuvieron que adaptar rápidamente, porque tuvieron que pasar de mover los productos de los centros de distribución a sus tiendas, a tener que hacer entregas a domicilio. “Hubo empresas que tuvieron que reconfigurar más del 80% la flota para dejarla lista únicamente para entregas de e-commerce”, dice Peña.