“Somos una compañía pequeña, pero global”, afirma Sergio Serra, director regional de ventas y marketing de Banyan Tree. “Durante los últimos 18 meses se han acelerado los proyectos que tenemos ya confirmados en expansión, e inclusive otros que están en una fase más temprana”.
La firma tiene actualmente cuatro hoteles en el país, y a partir del pasado 1 de noviembre sumó a su portafolio Banyan Tree Puebla, un complejo producto de una reconversión por un monto no revelado, y que se suma a otros proyectos como la construcción de un complejo en el Valle de Guadalupe, en Ensenada, cuya apertura está prevista en un periodo de 18 a 20 meses.
Anteriormente, la firma había anunciado una inversión de 50 millones de dólares para la construcción de 40 villas en su complejo de Banyan Tree Mayakoba, en Playa del Carmen, Quintana Roo, de la mano de la compañía RLH Properties. El cuarto proyecto que analiza aun no se concreta, por lo que la firma aun no revela su ubicación o características.
Modernizar los canales de distribución
A partir de la pandemia, la firma también ha visto un área de oportunidad para mejorar la comercialización y distribución de los hoteles en este segmento, sobre todo mediante la incorporación de más elementos tecnológicos, que les ha permitido ser cada vez menos dependientes de canales de distribución de terceros.
“Al haber muchas cancelaciones y cambios de planes constantes de parte de los viajeros, ha provocado que el consumidor se de cuenta de que, en gran parte, es más fácil hacer este tipo de cambios y modificaciones cuando está tratando directamente con el hotel y no a través de un intermediario”, explica el directivo.
También ha crecido el volumen de negocios que entra a través de sus canales directos, principalmente por su sitio web. "No significa que no vemos la importancia que tienen otros canales de distribución, por supuesto que la tienen, pero los hoteles hoy en día tienen una voz más personal y directa con el consumidor”.