“Un influencer puede situar a una marca en una buena posición y ayudarla a conseguir una mayor visibilidad. Por otro lado, cuando la asociación no se gestiona bien, puede generar una impresión negativa de una marca”, dice el análisis de Linqia.
También hay otras empresas que realizan sus campañas de mercadotecnia con celebridades, desde deportistas hasta figuras destacadas del cine, y han logrado tener resultados positivos. Un ejemplo es el de cerveza Tecate, que con ‘Somos box' tuvo una exitosa campaña con Sylvester Stallone, que marcó la entrada de la marca a los patrocinios de box. Este año presentó 'El guardián del sabor', que protagoniza Bruce Willis.
“Tener celebridades en una campaña siempre es muy llamativo, pero el éxito también depende de la historia que se quiere contar y del rol que la celebridad tiene en la construcción de la marca. En Tecate lo que tratamos que hacer es balancear la marca, celebrity e historia, para que tenga un impacto relevante para los consumidores”, dice Diana Lozada, brand manager de Tecate.
La directiva comenta que esta estrategia ayuda a que Tecate se posicione en la mente del consumidor para que cuando lleguen a un punto de venta, con la marca en la cabeza, es más probable que su elección de compra sea esa.
Por ahora, Tecate se mantiene dentro de las cervezas mexicanas destacadas. Este año, la marca se ubicó en el número 11 en el ranking de las 50 marcas más valiosas de México, que publica Brand Finance. En 2020 se posicionó en el puesto 12, en el que se había mantenido desde 2017.
“Estas estrategias son una oportunidad para que las marcas tengan la posibilidad de conectar con muchos públicos, que no conectaran de forma natural y tiene cierta personalización porque va dirigida a un target específico”, declara Pedro Beltrán Cuervo, especialista de la Facultad Mexicana de Arquitectura, Diseño y Comunicación de la Universidad La Salle.