La petrolera Shell abandonará todas sus operaciones en Rusia, incluida una empresa conjunta en una importante planta de gas natural licuado, debido a la invasión de Rusia a Ucrania.
La decisión se da a conocer un día después de que la petrolera inglesa BP anunció también que dejaría su participación en el gigante petrolero ruso Rosneft , una operación que podría costarle más de 25,000 millones de dólares.
Shell abandonará la emblemática planta de gas natural licuado Sajalín 2, en la que tiene una participación del 27.5%, y en la que el gigante ruso del gas Gazprom tiene un 50%.