Otras empresas como Arca Continental recurrieron a reducir la cantidad de producto a fin de mantener los precios actuales, sin comprometer las ganancias. El segundo embotellador de Coca-Cola en América Latina, lanzó en el primer trimestre del año un nuevo empaque personal de 250 mililitros en PET no retornable para refrescos con el eslogan “Amigos del Bolsillo”.
“Esta nueva presentación permite brindar asequibilidad, atraer nuevos consumidores y capturar una participación de mercado adicional en los canales tradicional y moderno”, dijo la empresa en su último reporte financiero.
En el periodo, la empresa también registró un crecimiento de su flujo operativo de 11% hasta los 8,527 millones de pesos. La utilidad neta alcanzó los 3,094 millones, 19.7% mayor comparado con el mismo trimestre del 2021.
Pero la nueva estrategia del gobierno federal para contener la inflación tanto en productos de la canasta básica, como en energéticos y algunos servicios, representa un nuevo reto para las empresas, que tendrán que enfrentar con inventiva, y ya no con un alza de precios generalizada, los mayores costos en materias primas y energéticos.
Walmart, una de las empresas que se adhirió de forma voluntaria al pacto, dice estar convencida de que, creando sinergias entre los diferentes sectores, apoyarán a mitigar los impactos negativos de la inflación, de la mano de la estrategia de precios bajos que ofrece en los diversos formatos que opera, desde Sam’s hasta Bodega Aurrera.
“En todos los formatos comerciales que tenemos en el país, trabajamos bajo un modelo de negocio de ‘costos bajos todos los días’, que nos permite a su vez ofrecer ‘precios bajos todos los días’. Aunado a dicho modelo, trabajaremos en coordinación con el gobierno, nuestra operación y nuestros proveedores para generar las eficiencias planteadas en PACIC de mantener el menor precio posible, en todo el país, en 24 artículos de la canasta básica”, dijo la compañía en un correo electrónico.
Expansión consultó a Gruma, Bachoco y Grupomar para conocer los alcances del acuerdo, pero las empresas no estuvieron para hacer comentarios sobre el tema.
Arancel cero para la importación de granos, ¿un respiro para los costos operativos?
La estrategia gubernamental plantea que serán las compañías la que se encargarán de establecer el precio de los productos. Además establece cero aranceles durante seis para la importación de algunos insumos como harina de maíz, harina de trigo, maíz blanco, sorgo y trigo.
Como resultado de la inflación en materias primas y mayores costos en la mano de obra, en el primer trimestre del año, Gruma enfrentó un aumento de 20% en el costo de ventas a 825 millones de dólares, mientras para Bachoco el efecto fue similar con precios “históricamente altos” en los granos y la pasta de soya, lo cual resultó en un incremento de 27.1%.
En su último estado financiero, Lala informó que los gastos operativos del primer trimestre aumentaron 8.4% año con año, a 5,817 millones de pesos, principalmente por impactos inflacionarios.