Leipzig, Alemania. Las necesidades de financiamiento de proyectos de inversión en la región latinoamericana enfrentan un entorno de alzas tasas de interés, lo que dificultará el acceso a recursos desde la banca de desarrollo, un proceso en el que ahora se encuentran empresas e incluso el Gobierno mexicano.
Al respecto, Antonio Pinheiro, vicepresidente de Infraestructura del banco de desarrollo CAF, explica que desde la pandemia la falta de liquidez se hizo particularmente presente en sectores como el aéreo y el turístico, cuyos ingresos se vieron arrasados por la caída en la demanda. Desde principios de 2020, cuando el coronavirus detuvo los viajes aéreos alrededor del mundo, al menos 68 aerolíneas entraron o salieron de la bancarrota, o fueron liquidadas, según datos de la consultora especializada en el sector Ascend by Cirium.
Ahora, la banca de desarrollo surge como una alternativa, pero las condiciones en el costo del dinero resultan particularmente adversas.
"No necesariamente son los niveles de las tasas de interés, sino los cambios que haya hasta que se tenga una estabilización", dice Pinheiro en entrevista. "Para inversiones a largo plazo genera algunas cuestiones, pero en los ambientes estables tenemos más previsibilidad".