Citibanamex ha afianzado la tenencia de los plásticos gracias a las promociones que tiene con OCESA, con las preventas de boletos para conciertos. Manuel Romo, director general del banco, explica que, pese a que están en trámites de venta, las promociones con sus plásticos siguen vigentes y atrayendo a más clientes.
Y aunque el negocio minorista esté a la venta, Citibanamex no dejará de invertir en innovación tecnológica: el banco busca mejorar los servicios de call center, la apertura de nuevas sucursales y la renovación de cajeros automáticos, señala su director.
La importancia del crédito automotriz
La menor venta de vehículos en México ha provocado una caída de hasta 8% en los financiamientos. La falta de venta de autos nuevos ha tumbado el financiamiento que hace la banca y, por ello, han lanzado programas para que los usuarios adquieran vehículos usados. Santander, por ejemplo, busca atrapar a los más de ocho millones de personas que al año compran un auto entre particulares: “Abrir el crédito bancario para comprar un auto seminuevo entre particulares es la respuesta que hacía falta en el mercado para atender a millones de mexicanos que cada año buscan un auto”, considera Julio Ascorve Zermeño, director ejecutivo de Financiamiento Automotriz de Santander México.
Hipotecas bien cimentadas
Si hubo una cartera que supo mostrar resiliencia en la pandemia, fue la de vivienda. Este tipo de crédito reportó en 2021 un crecimiento de 6% en comparación con el año anterior. Este avance, de acuerdo con la ABM, se debió a que el país enfrenta un déficit de vivienda y por las bajas tasas de interés de hasta un dígito que manejaron los bancos.
“Los créditos subieron debido a las mejores condiciones económicas, la sobreoferta de inmuebles, tasas accesibles y facilidades en el otorgamiento de hipotecas. Si bien no será pronto, la tendencia debería normalizarse cuando el costo de las viviendas sea mayor por la inflación de costos en los materiales de construcción, las tasas activas de hipotecas sean superiores y la base comparable más difícil de superar”, dice Carlos Gómez, analista del sector en Intercam Casa de Bolsa.
Y en cuanto al financiamiento a empresas, una vez que se consigan las licencias ante las autoridades, Citi México competirá con los bancos que ofrecen créditos a grandes corporaciones. Al cierre de 2021, este tipo de crédito tuvo una contracción de 3.4%. El 77.3% de esta cartera se compone de préstamos a grandes empresas, 17.6%, a entidades gubernamentales, y el 5.1%, a entidades financieras. Los líderes son BBVA México, Santander y Banorte, pero entre el top 10 aparecen otras entidades, como el Banco del Bajío, Banregio y Sabadell.
La digitalización y lo que viene
Con la pandemia, el uso de las herramientas digitales también se aceleró y los bancos vieron que la adopción de aplicaciones crecieron en un año lo que estaba planeado en cinco. Un ejemplo de ello es Citibanamex, cuya app bancaria reportó un crecimiento de hasta 80% en la pandemia.
A la vez que invierte muchos más recursos en mejorar la experiencia de sus usuarios en los dispositivos móviles, la banca ha reducido la presencia de sucursales y el año pasado se reportaron 11,698, 3% menos que en 2020, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Además, un estudio de la firma The Cocktail Analysis muestra que la confianza de los consumidores será clave en la elección de su banco principal. El análisis también destaca que los consumidores tendrán más de un banco. “Se nota una reducción interesante en la proporción de clientes ‘monobanco’, que pasó de un 63% en 2019, a un 46% en 2022”, destaca el reporte.
Los mexicanos ya no solo tienen una cuenta de bancos ‘tradicionales’, ahora se suman los neobancos que aparecen como una alternativa viable adicional a su banco principal. Las fintech y neobancos representan ya un 17% en el total de los usuarios mexicanos bancarizados.
Un dato importante es que 52% de los encuestados no bancarizados dicen que nunca han tenido una cuenta debido a que no tienen necesidad de una y la desconfianza hacia las entidades financieras.
El sector bancario tiene el reto de bancarizar a más de 60% de la población que no posee una cuenta o una tarjeta bancaria. El desafío se une a una transición de la digitalización de las operaciones y a saber quién se queda con uno de los bancos más antiguos y grandes del sistema.