Lo anterior llevó a que su flujo operativo totalizara 298.2 millones de dólares, lo que significó un retroceso de 45.7% en comparación con el mismo trimestre del año anterior.
Las ventas netas totalizaron 1,469.7 millones de dólares, lo que significó una reducción de 6.6%, en donde destaca la disminución en su producción de oro, que se descendió17.2% por un menor volumen de mineral procesado.
De igual forma, la producción de plomo retrocedió 3.9% y la de mineral molido 1.9%, mientras que la de plata y zinc registraron ligeros avances, de 1.4% y 1% respectivamente.
Aunado al panorama anterior, la minera destaca un aumento en sus costos de producción, debido a un mayor consumo de materiales en las operaciones y el encarecimiento de sus insumos, subrayando también que la inflación ha generado un entorno económico con mayores preocupaciones.
“La inflación persistente ha incrementado las preocupaciones sobre una recesión o estanflación global. Lo anterior, junto con la implementación de políticas monetarias más estrictas, fueron los factores que provocaron mayor volatilidad e incertidumbre en los mercados durante el segundo trimestre de 2022”, añade.
Lo anterior provocó que los precios del oro y la plata tuvieran altibajos, con mayor sesgo a la baja en el corto plazo. La cotización por onza de oro la ubicó en 1,870.58 dólares, lo que significó un ligero avance de 3% frente al mismo periodo del año pasado.
Por el contrario, el precio promedio por onza de plata a lo largo del segundo trimestre fue de 22.62 dólares, lo que implicó una reducción de 15.5%, mientras que la disminución en el precio del cobre fue de 2.0%.