Los fabricantes de cerveza y refresco han sido señalados por el gobierno federal como grandes consumidores de agua, e incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo a principios de agosto que ya no se les permitiría a las empresas aumentar su capacidad productiva en el norte del país debido a la crisis hídrica por la que atraviesa la región.
“¿Quieren seguir aumentando la producción?Todo el apoyo para el sur-sureste, ahí está el Grijalva, ahí está el Usumacinta, ahí está el Papaloapan”, dijo el mandatario. "Pero ya no se puede dar permiso en donde no hay agua", añadió.
Nuevo León es el tercer productor más grande de cerveza en el país y contribuye con 11% de la producción, detrás de Zacatecas (24.1%) y Coahuila (11.5%), según los últimos datos de Inegi. La multinacional Heineken y unas 40 plantas artesanales de cerveza tienen operaciones en la entidad, además de Arca Continental, el segundo mayor embotellador de la refresquera Coca-Cola, y GEPP, el embotellador de PepsiCo.
No es la primera vez que el presidente Andrés Manuel López Obrador pide a una empresa del sector que mueva sus operaciones hacia el sur del país. Constellation Brands, por ejemplo, tuvo que interrumpir la construcción de una planta en Mexicali, Baja California, y trasladar la operación a Veracruz, luego del rechazo de los ciudadanos en una consulta popular realizada en 2020.
Pese al anuncio del presidente de “vetar” nuevos proyectos de inversión o de expansión de los fabricantes de cerveza y refresco en el norte del país, Samuel García, gobernador de Nuevo León, dijo en entrevista que hasta ahora no tiene noticias de desinversión en el sector. "Al contrario, he hablado con ellas (las cerveceras y refresqueras) y todas me han dicho que van a invertir en plantas de reciclaje y reúso de agua. Y eso va a permitir que esa agua que usan la reutilicen en sus procesos o para el sector agrícola, así que no va a haber ningún detalle con ellas", detalló en entrevista.