Su fundador, Salvador Flores aprendió a a hacer chocolate a los 17 años con su tía, quien tenía un pequeño molino en el que lo preparaba, además molía chiles para mole, otro platillo tradicional.
Flores se trasladó a la Ciudad de México (antes Distrito Federal) y encontró trabajo como velador en una fábrica. Pasados tres años regresó a su estado natal e instaló un molino con los ahorros de su trabajo en la capital.
El negocio fue creciendo y Chocolate Mayordomo nació en 1956 como empresa familiar originaria de Tlacolula, Oaxaca.
Eventualmente la marca salió de Oaxaca hacia otros estados y posteriormente fuera del país. Cuentan con sucursales en Oaxaca, CDMX, Puebla y Zapala; también exporta a Estados Unidos y Europa (Francia, Italia y España).
“Nuestro chocolate es preparado íntegramente con productos naturales como el cacao, la canela, la almendra y el azúcar”, señala la compañía.
Chocolate Mayordomo sigue siendo una empresa 100% mexicana dedicada a la elaboración de chocolate y mole.