Pese a las previsiones, Volaris se encuentra actualmente planeando en caso de que el país salga de la Categoría 2 antes de ese plazo.
“Volaris está bien posicionado para beneficiarse de un probable regreso a la Categoría 1 de la FAA en 2023, el cual esperamos que detone rutas adicionales a Estados Unidos e impulse más oportunidades”, dijo Enrique Beltranena, CEO de la aerolínea, citado en un comunicado de prensa.
Después de México, Estados Unidos es el país donde la compañía visualiza la mayor oportunidad de crecimiento, con un estimado de 125 a 145 potenciales rutas en el mediano plazo. Esto supera a otros mercados, como Centroamérica –donde estiman un rango de 35 a 45 rutas replicando su modelo enfocado en viajes de familiares y amigos, ya probado entre México y Estados Unidos– y otros mercados como Sudamérica y Canadá, donde el umbral va de 50 a 60 rutas.
En el corto y mediano plazo, la aerolínea tiene la mira puesta en ambiciosos resultados. Durante los siguientes tres años, espera duplicar sus ingresos, flujo operativo (o EBITDAR) y la generación de flujo de efectivo respecto a los niveles prepandemia.
Parte de esta estrategia apunta a que los ingresos adicionales concentren hasta la mitad de los ingresos operativos de la compañía desde el índice actual, de 41%. Para lograrlo, la aerolínea apunta a ofrecer productos cada vez más personalizados, la venta de wi-fi durante los vuelos, un programa de lealtad con un “gran retailer latinoamericano” del que no dio más información, pero que se lanzará el siguiente año, entre otras acciones.
La compañía también trazó su ruta de renovación de aeronaves. Para este año, prevé cerrar con 116 equipos que escalará hasta 160 aviones para 2027, con una sustitución completa de las versiones CEO a las NEO de los equipos Airbus. Con la renovación de equipos, la aerolínea estima ahorros por 244 millones de dólares a la fecha.