General Motors anunció en 2021 una inversión de más de 1,000 millones de dólares en la planta para empezar a producir vehículos eléctricos a partir de 2023, con miras a finalizar la producción de modelos a gasolina en Coahuila de forma paulatina.
La planta mexicana será el quinto sitio de manufactura de General Motors, en Norteamérica, en producir vehículos eléctricos, uniéndose a Spring Hill, Tennessee; Factory Zero y Orion, en Michigan, y CAMI en Ontario, Canadá.
El arranque de producción de los modelos eléctricos, Blazer EV y Equinox EV, reducirá la capacidad de producción de las versiones a gasolina de ambos SUV, que actualmente también se ensamblan en Ramos Arizpe.
El fabricante estadounidense dijo a mediados de 2021 que para compensar esta reducción de capacidad en la planta norteña finalizaría el ensamble del sedán Onix en San Luis Potosí, para incrementar la producción de Blazer y Equinox. Onix ahora se importa desde China.
Nota del editor: Una versión anterior de esta nota contenía un dato impreciso de la Secretaría de Economía, respecto a los empleos generados. General Motors aclaró que sumó 4,500 empleos, y no 5,000, en dos de sus plantas en el país.
Con información de Reuters