"Les hago un llamado a las empresas automotrices que quieran venir a Hidalgo a invertir en líneas de producción de eléctricos: aquí estamos con los brazos abiertos, podemos ofrecer un paquete de facilidades. Pero ya no para los automóviles a gasolina", dijo, en noviembre de 2021, Omar Fayad, entonces gobernador de la entidad. La invitación fue hecha durante la celebración de los 15 años de la planta de Giant Motors Latinoamérica. Un complejo que hace 30 años se dedicaba a la fabricación de camiones Dina, y que luego fue adquirido por la familia Massri, que le ha dado un giro hacia la electromovilidad.
En esta planta, Giant Motors ya ensambla seis vehículos eléctricos, además de dos comerciales, de la marca china Jac. El último de ellos, un city car de cuatro puertas de 449,000 pesos –hay una versión diseñada para entregas de última milla que es incluso más barata–, fue presentado entonces como el modelo eléctrico con el precio más bajo que se puede encontrar en el mercado mexicano.
El sucesor de Fayad, el morenista Julio Ramón Menchaca, vio en Tesla una posibilidad para concretar el ambicioso objetivo que sus predecesores se habían planteado. Hidalgo fue ampliamente promovido por el presidente López Obrador, que resaltó la disponibilidad de agua en la entidad y su cercanía con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles -una de sus obras emblemáticas-, e incluso el mandatario amagó con no otorgar los permisos de agua a la nueva planta si decidía instalarse en un un estado “con problemas de agua”.
Pero tras mantener una segunda conferencia telefónica con el presidente mexicano, Musk finalmente decidió ubicar la nueva planta de Tesla en Santa Catarina, un municipio colindante con Monterrey, la opulenta capital de Nuevo León.
Qué tiene Nuevo león, que Hidalgo no
Hasta ahora, todo parece indicar que la colindancia con Estados Unidos y la vocación automotriz de Nuevo León -que alberga una planta de Kia y plantas de varios proveedores de Tesla- jugaron a favor de la entidad. En el pasado, cuando BMW anunció la instalación de su planta en San Luis Potosí, el entonces gobernador de Hidalgo, José Francisco Olvera, explicó que la falta de infraestructura llevó a la alemana a instalarse a las afueras de la capital potosina y no en Ciudad Sahagún.
El gobierno estatal trató de convencer a la firma alemana con paz social, con seguridad, con disponibilidad de mano de obra y con ubicación geográfica (cercanía con Puebla y Ciudad de México), pero la falta de carreteras, vivienda y amenidades 'de alto nivel' jugó en contra de Hidalgo.
Olvera entonces reconoció que en la entidad aún había “mucho por hacer” para igualar el nivel de vida que hay en zonas con mayor desarrollo, en tanto que 30% de la superficie de la entidad aún es rural. “Hace falta desde vivienda de alto nivel, hasta restaurantes y clubes de golf. En Pachuca apenas hay un campo de golf de 9 hoyos, bastante limitado (en comparación con los tres que hay en San Luis Potosí)”, ejemplificó.
La brecha en la calidad de vida que hay entre Hidalgo y otras ciudades aún se mantiene. La entidad es la décima con el amyor porcentaje de población con un ingreso laboral inferior al valor monetario de la canasta alimentaria, según datos de Coneval. En contraste, Nuevo León está casi al final de la tabla de pobreza laboral, en la posición 29, de 32 entidades.
¿Una planta de baterías de Tesla en Hidalgo?
Pese a que Nuevo León se quedó con la planta de vehículos, el presidente mexicano dejó la puerta abierta a Musk para instalar una planta de baterías en Hidalgo y así poder cascadear al sur del país parte del beneficio que generará Tesla con su inversión en Nuevo León.
“Hablamos también de otras opciones... de Hidalgo para una posible planta de baterías, porque lo de (la planta de vehículos en) Nuevo León se vincula mucho con una planta de baterías que tiene (Tesla) en Austin, Texas", dijo el mandatario en su conferencia mañanera.
Pero, aunque Hidalgo tiene “evidencia geológica de presencia de litio” en tres localidades, no tiene infraestructura para su extracción o explotación. Además, su cercanía con el AIFA, resulta irrelevante para este tipo de operaciones, en tanto que el traslado de baterías de litio vía aérea no es recomendado, debido a que pueden autoprenderse y arder con un calor de aproximadamente 600 grados centígrados.
En cualquier caso, el mandatario mexicano invitó a Musk para venir a México y analizar otras oportunidades de inversión.