El otro gran hueco es la parte relacionada con la electrónica. Desde que comenzó la pandemia por Covid-19, ha habido un gran hueco en la producción de electrónica, que ha repercutido en la producción automotriz. México no produce estos componentes, pero el país vecino del norte ha emprendido esfuerzos para contar con fabricantes de semiconductores para la región de América del Norte. Esto podría mejorar la situación en México.
“Yo esperaría que se desarrolle una industria más integrada de electrónica en la región, porque los coches eléctricos u autónomos van a tener mucha más electrónica y eso no podemos seguir importándolo del otro lado del mundo”, añade.
A mediados del año pasado, Quanta Computer, una empresa taiwanesa especializada en el diseño y fabricación de productos electrónicos para su uso en tecnologías de la información, anunció una inversión de 130 millones de dólares para duplicar la superficie de su planta en Monterrey, Nuevo León. Esto podría mejorar la situación de producción de electrónica en México y, por lo tanto, también la producción automotriz.
Según algunos expertos, Quanta es el proveedor clave de Tesla para el suministro de componentes electrónicos, por lo que su expansión es una acción estratégica enfocada en ampliar su capacidad de proveeduría para el fabricante estadounidense.
De acuerdo con la INA, de cada cinco autopartes de un Tesla, una corresponde a proveeduría mexicana.
Al cierre de 2022, los arneses, hilos y cables fueron las autopartes más exportadas por México a otros mercados, con un monto de 10,400 millones de dólares, seguidos de partes troqueladas y accesorias para carrocerías, asientos y sus partes, así como cajas de cambio con sus partes.
El gerente de Estudios Económicos de la INA, Julio Galván, afirmó durante una conferencia de prensa que “un 80% de un vehículo eléctrico producido en México ya tiene partes hechas en nuestro país”.
Pero a medida que la demanda de vehículos eléctricos y autónomos continúa creciendo, México deberá llenar los huecos de proveeduría para seguir siendo un líder en la producción de autopartes a nivel global.
"El coche eléctrico está cambiando lo que no ha cambiado en 100 años y hay empresas que si no se transforman van a desaparecer una vez que el coche de gasolina lo haga”, concluyó Montoya.