Adidas venderá parte de la mercancía de su difunta asociación Yeezy con el rapero Kanye West y donará parte de los ingresos a organizaciones internacionales, dijo el jueves el presidente ejecutivo, Bjoern Gulden.
El gigante alemán de la ropa deportiva se ha visto en un aprieto por las acciones de Yeezy desde que cortó lazos con West por sus comentarios antisemitas a fines del año pasado, con la controversia pesando sobre sus acciones y golpeando sus utilidades.
Adidas cerró con pérdidas el primer trimestre del año, debido al impacto de su ruptura con el controvertido rapero estadounidense Kanye West, según reportó este viernes.
La empresa registró una pérdida neta de 39 millones de euros (43 millones de dólares) de enero a marzo, en comparación con una ganancia de 482 millones de euros en el mismo periodo del año anterior.
Su beneficio operativo fue de 60 millones de euros, una caída del 87% respecto al mismo período del año anterior, mientras que las ventas se mantuvieron casi estables en 5,280 millones de euros.
Sin embargo, la empresa dejó de ganar 400 millones de euros a causa de la finalización de la producción y venta de su exitosa línea de zapatillas deportivas Yeezy, diseñada en colaboración con West.
Adidas rescindió su contrato con West, ahora conocido como Ye, en octubre pasado, después de que el rapero hizo una serie de comentarios antisemitas.
La compañía había anunciado en febrero que podría sufrir una pérdida operativa de hasta 700 millones de euros este año si decide cancelar el valor de todo su inventario existente de Yeezy.
A principios de mayo, un grupo de inversionistas estadounidenses presentó una demanda en contra de Adidas, luego de sufrir una significativa disminución en sus ganancias debido a la separación con el polémico rapero Kanye West. Alegan que la compañía tenía conocimiento del "comportamiento problemático" del rapero desde hace varios años, pero no puso fin a su asociación hasta octubre del año pasado, además de no haber tomado las precauciones necesarias para mitigar las pérdidas económicas.
Dirigiéndose a los inversores en la ciudad de Fuerth, en el sur de Alemania, después de que la debacle contribuyera a la primera pérdida anual de la empresa en 31 años, Gulden dijo que aún no se había determinado cuándo y cómo se llevaría a cabo la venta prevista.
Millones de zapatillas de la marca Yeezy, con un valor de venta al público de 1,200 millones de euros (1,300 millones de dólares), están almacenados después de que se suspendiera su venta. Su valor en el mercado de reventa se ha disparado desde que Adidas dejó de producirlas, y algunos modelos han duplicado con creces su precio.
"Lo que estamos intentando hacer ahora con el tiempo es vender parte de esta mercancía (...) quemar la mercancía no sería una solución", dijo, añadiendo que los beneficios se donarían a organizaciones internacionales a las que West, que cambió su nombre por Ye en 2021, había perjudicado con sus comentarios.
Gulden dijo que la empresa decidió no donar las zapatillas para evitar que llegaran al mercado de forma indirecta.
Con información de Reuters y AFP
