¿Cuál es la diferencia entre un híbrido convencional y un PHEV?
Cada vez más fabricantes están estudiando la posibilidad de ampliar la oferta de modelos híbridos enchufables. La decisión dependerá, en gran medida, de la demanda y las condiciones del mercado. “En cualquier caso, creemos que este es un buen momento para comenzar a pensar en la introducción de estos vehículos, ya que existe un mayor entendimiento y aceptación de las tecnologías híbridas y eléctricas por parte de los consumidores”, dice Romero.
Aunque un híbrido enchufable combina un motor de combustión con un sistema eléctrico, igual que un híbrido convencional, ambas tecnologías son diferentes. Un híbrido convencional no se conecta, el segundo sí. Un híbrido convencional no puede recorrer varios kilómetros en modo completamente eléctrico, el híbrido enchufable sí. Y, debido a esto, un híbrido enchufable promete un mayor ahorro en el gasto de combustible. ¿Entonces un PHEV es la mejor opción?
Híbrido tradicional y PHEV: ¿cuál elegir?
Emilio López, gerente de producto de Mazda, dice que la elección depende del perfil y las necesidades individuales de cada persona. En primer lugar, señala que es fundamental tener en cuenta el motivo por el cual se está optando por un vehículo híbrido.
Por ejemplo, si la persona planea utilizar el vehículo para viajes largos en carretera o si planea usarlo principalmente en exteriores, como al ir de excursión a la montaña o en otras actividades al aire libre, es posible que no haya disponibilidad de cargadores en esos lugares. En esta situación, un híbrido tradicional podría ser más adecuado para ese estilo de vida, ya que no se requiere cargar las baterías y no se experimentarían problemas relacionados con ello.
Por otra parte, si alguien se desplaza principalmente en entornos urbanos y realiza trayectos cortos, podría considerar la opción de un vehículo híbrido enchufable. Este tipo de automóvil ofrece un ahorro de combustible considerable, sobre todo en recorridos urbanos, y resulta especialmente útil en ciudades con una infraestructura de carga más avanzada.
Es importante tener en cuenta la disponibilidad de cargadores, especialmente en el contexto mexicano, donde la infraestructura de carga aún está en desarrollo. Si no se cuenta con un cargador en casa o en lugares frecuentes, la opción de un híbrido tradicional puede resultar más conveniente.
Consumo de combustible
Con un coche híbrido convencional puedes ahorrar hasta un 30 % en combustible y emisiones; mientras que la media de ahorro de combustible de un PHEV, frente a un gasolina, llega hasta el 50% si se recarga la batería al 75%, según datos de los fabricantes.
Pero López precisa que el rendimiento puede variar según el estilo de conducción y otros factores. Mantener las revoluciones del motor en un rango óptimo, independientemente de si es un híbrido tradicional o enchufable, puede proporcionar el mejor ahorro de combustible. Sin embargo, si se realiza una conducción agresiva, éste puede verse afectado.
Además, factores como el clima extremo pueden influir en el rendimiento de la batería de un vehículo híbrido enchufable. En temperaturas muy bajas o muy altas, la eficiencia del sistema eléctrico o del motor puede reducirse.
Verificación y tenencia
Los híbridos enchufables tienen la posibilidad de renovar el holograma de exento -y evitar la verificación-hasta por 16 años, mientras que los híbridos convencionales solo lo pueden tener por ocho años, sin posibilidad de renovación. Ambos tipos de tecnología están exentos de tenencia.