La empresa chilena SAAM finalizó la venta por 995 millones de dólares de sus terminales portuarias y operaciones logísticas a la firma alemana Hapag-Lloyd, tras un acuerdo de compra firmado en octubre de 2022 y tras haber obtenido la aprobación de las autoridades antimonopólicas de los países donde operan.
Dentro de esta transacción se encuentra la compra por parte de la naviera Hapag-Lloyd de la Terminal Marítima Mazatlán (TMAZ), ubicada en el estado de Sinaloa. Esta terminal opera contenedores y acero, pero también se ha vuelto necesaria para la importación de automóviles desde China, ante la saturación que enfrenta el puerto de Lázaro Cárdenas.