Tras su finalización, programada para el primer trimestre de 2026, la terminal podrá manejar una capacidad de rendimiento anual de 2.2 millones de contenedores.
"Esta expansión posiciona a la terminal como un centro clave en la región. El aumento de la capacidad, nuevos equipos y el espacio en el patio, elevarán el estándar de eficiencia en la terminal, a través de flujos de tráfico optimizados y mejorará los tiempos de tránsito transfronterizo, un elemento clave del T-MEC", dijo Leo Huisman, director general regional de APM Terminals Américas, citado en un comunicado.
La nueva fase también incluye nuevos equipos para mejorar la capacidad portuaria, como seis grúas pórtico automatizadas montadas sobre rieles y 14 nuevos shuttle carriers.
"Además de una mayor eficiencia que reducirá los costos logísticos tanto para las líneas navieras como para los clientes terrestres, la nueva fase incluirá varias iniciativas sostenibles y generará 500 empleos directos adicionales y 900 indirectos durante la fase de construcción", agregó Marliz Bermúdez, directora general de APM Terminals México.