Un tribunal de Ámsterdam dictaminó que la aerolínea holandesa KLM engañó a los consumidores con anuncios "vagos y generales" sobre sus esfuerzos para reducir el impacto ambiental de volar en avión.
El caso, llevado ante la justicia por la organización Fossielvrij NL (Países Bajos Libres de Fósiles), acusa a la empresa de "greenwashing" o lavado de imagen verde, práctica de algunas compañías encaminada a aparentar ser más respetuosas con el medioambiente de lo que en realidad son.