Starbucks ha encontrado una veta de crecimiento al dirigirse no solo a los amantes del café, sino también a aquellos que prefieren alternativas sin cafeína. Con 830 locales en todo el país, la cadena ha consolidado su posición entre las nuevas generaciones mediante la introducción de bebidas atractivas que no contienen café, junto con una gama diversa de productos como tumblers, tazas y llaveros.
Si bien Starbucks ha sido reconocido mundialmente por sus clásicos como el Caramel Frappuccino y el Flat White, su reciente incursión en bebidas sin cafeína y la ampliación de su línea de té y matcha han captado la atención de un público más diverso. Andrea Sil, líder de bebidas de Starbucks México, destaca que la colaboración estrecha con el centro de innovación en Estados Unidos ha sido fundamental para desarrollar sabores adaptados a las preferencias locales y a las tendencias emergentes.
“Estamos en constante búsqueda de información para identificar hacia dónde se dirigen las tendencias y determinar cuáles son los nichos que queremos abarcar”, mencionó Sil, subrayando la capacidad de Starbucks para alinearse con las dinámicas globales del mercado mientras satisface las demandas locales.