La semana pasada el empresario de origen sudafricano señaló que la fábrica podría no ponerse en marcha si es que se imponen aranceles a la importación de los autos producidos en México, una medida que podría aplicar el candidato republicano Donald Trump en caso de ser electo.
Pero más allá del anuncio del candidato, Loo resalta la existencia del T-MEC y su integración en el comercio regional como una herramienta que continuaría con el intercambio entre las tres economías.
Con el acuerdo comercial y las cualidades de Nuevo León en la fabricación de autopartes, principalmente por la existencia de la armadora de KIA en Pesquería, el funcionario mexicano resalta que la entidad adquiere una importancia internacional en cuanto a temas de proveeduría.
“Al final todas (las armadoras) tienen interés de vender en México y Estados Unidos, y creo que una de las cosas que nos hacen muy competitivos es eso que ya hemos logrado con KIA y Hyundai, que tienen el 100% de su proveeduría en el mismo estado. No hay ninguna armadora que pueda decir lo mismo, lo que nos hace altamente competitivos en la industria automotriz”, sostiene.
De acuerdo con la última información de la Industria Nacional de Autopartes, el valor de la producción de autopartes en Nuevo León de enero a abril de este año sumó 5,374 millones de dólares, colocándose como el tercer estado con la producción más alta, solo detrás de Coahuila y Guanajuato.
¿Y el proyecto de Tesla?
Así como se informó desde el Gobierno de la entidad, éste no ha recibido ninguna notificación formal de alguna cancelación sobre el proyecto de Tesla en Nuevo León, de tal forma que se sigue trabajando en éste.
La última información que se hizo pública sobre el otorgamiento de permisos a Tesla fue en diciembre del año pasado, cuando desde la Secretaría del Medio Ambiente se notificó a la compañía los títulos correspondientes al uso de suelo, a fin de instalar la fábrica en el municipio de Santa Catarina.
“Estamos terminando los permisos que faltan, de hecho, normalmente un proceso tradicional de permisos toma dos años, de hecho, creo que nosotros lo hemos hecho en tiempo récord y ahí seguimos. Ellos (Tesla) están viendo trámites con el Gobierno Federal. De nuestra parte ya casi todos están listos, entonces nosotros seguimos en nuestra parte, en lo que nos corresponde”, asevera.
Asimismo, resalta que los tiempos en la industria automotriz son largos, puesto que un proyecto para la fabricación de un nuevo vehículo toma años, más aún la puesta en marcha de una nueva fábrica.
“La empresa (KIA) se empezó a contactar en el 2008, se confirmó el anuncio en el 2012 y los primeros autos empezaron a salir en 2016, y hoy en 2024 estamos por llegar a los dos millones de autos de esa armadora, y una expansión que viene de la misma, nada más para que vean el tiempo que toma un proyecto tan grande. De 2008 a 2016 son ocho años, entonces yo creo que Tesla va mucho más rápido de lo que pensamos, va mucho más rápido de los proyectos tradicionales”, concluye.