Consejos para eliminar los gastos hormiga
Hay una triada de preguntas que te ayudan a saber si tus gastos son una fuga o una inversión. La primera es "¿realmente lo quiero?", la segunda es "¿me alcanza para comprarlo sin sacrificar otra cosa?", y la tercera "¿lo necesito?".
Si la respuesta es afirmativa en todos los casos entonces no tienes mucho que pensar, pero si sacrificas la posibilidad de cambiar tu viejo celular, que a veces se apaga, por tomarte un par de cafés al día entonces quizá haya algunas cosas que considerar.
Para tener una estrategia de finanzas personales en la que los gastos hormiga no se conviertan en una plaga, la Condusef recomienda realizar un presupuesto básico de ingresos y gastos, para ello toma en cuenta los siguientes pasos:
1. Divide tus gastos en fijos y variables.
2. En tus gastos fijos considera sólo alimentación, vivienda y servicios, y transporte.
3. En tus gastos variables considera calzado, vestido, servicios de comunicación, cuidado personal, limpieza del hogar y diversión.
4. Una vez que hayas registrado tus gastos por al menos tres meses analiza qué puedes recortar, este paso se facilita cuando haces la suma de cuánto de tu ingreso se consume entre propinas, botellas de agua, refrescos y golosinas .
5. Inicia una estrategia de ahorro, el dinero que destinas a los gastos hormiga es el que tienes más disponible, esas monedas extra en el carro, el cambio que te dieron cuando pagaste con un billete. Destina todas esas ‘monedas sobrantes' al ahorro y convierte este concepto en un gasto fijo al que destines la proporción más alta que puedas de tu sueldo, con el tiempo verás como ese gasto hormiga se convierte en un fructífero ‘guardadito hormiga'.