Musk continuó publicando unas viñetas de un cómic y respondió "bien" a una ilustración de la criptomoneda rival dogecoin posteada por la plataforma Coinbase. No quedó claro si algunos de los tuits significa algo, si es que el caso.
El multimillonario ya había dicho que Tesla no venderá sus bitcoines, pero sus tuits fueron suficientes para sacudir a unos mercados que siguen frágiles tras el hundimiento de mayo.
"Cuando Elon Musk tuitea cualquier contenido relacionado con los cripto, el mercado (...) espera una reacción", dijo Nick Spanos, cofundador del proyecto suizo ZAP Protocol.
El desplome del bitcoin le presionaba por debajo de su promedio móvil de 20 días hasta un mínimo de 36,263 dólares, y restaba algo de cobertura a sus ganancias en lo que va de semana, donde acumula un alza del 2%.
La segunda mayor criptomoneda, el ether, que tiende a moverse en tándem con el bitcoin, perdía un 8%, a 2,626 dólares, aunque seguía en camino a apuntarse su segunda ganancia semanal consecutiva.
Dogecoin, la criptomoneda más sensible tal vez a las opiniones de Musk, que ayudó a que una divisa que nació como una broma alcance una valoración de mercado multimillonario, caía también más de un 10%, a cerca de 0.36 dólares.
Su cuenta de Twitter ha afectado a otras partes del mercado: Samsung Publishing Co., accionista de la productora de la canción viral de YouTube “Baby Shark”, subió esta semana después de que Musk tuiteara sobre el jingle.