A finales del año pasado, la industria petrolera se encontraba moribunda: los cierres de diversas actividades económicas por la pandemia y las voces clamando el fin de los combustibles fósiles descalabraron a las petroleras en la Bolsa. Un año después, la próxima llegada del invierno y la transición a energías renovables -paradójicamente- parecen darle un respiro al sector y a sus inversionistas.
Pese a las presiones para deshacerse de su negocio de oil & gas, las acciones de las principales petroleras del mundo registran un rally alcista desde que inició este año, alcanzando niveles no vistos en años.